El Mallorca vence por 2-1 al Espanyol tras remontar un gol en propia de Muriqi en el inicio de la segunda mitad en un encuentro marcado por el VAR y la magnifica actuación de Joan García.
El equipo de Arrasate arrancó el partido demostrando que saltaba al campo para ser dueño y señor del partido ante un Espanyol que lejos de rebelarse aceptó el guion de partido como si supiesen que hoy les iba a tocar adoptar un papel secundario. A pesar de ello la primera ocasión fue para los pericos, que desde un saque lateral aprovecharon un despiste defensivo del Mallorca para que Edu Expósito en dos toques muy veloces rematara un poco por encima de la meta defendida por Greif. Fue un espejismo, el Mallorca tenía la pelota y Morlanes y Darder dominaban el centro del campo. Los bermellones hundían cada vez un poco más a los visitantes en su propio campo y llegaron las ocasiones para el Mallorca. Primero fue Dani Rodríguez con un gran testarazo a centro de Maffeo que terminó blocando Joan García y pocos minutos después, desde el otro costado, Mojica serviría un balón raso y fuerte para Asano, que con el exterior y a bote pronto colocó la bota izquierda y mandó su remate a escasos centímetros del palo derecho con el Joan García ya vencido. Se animaba la grada derecho Son Moix y apretaba el Mallorca. Ocurrió todo en los primeros compases del partido y luego el Espanyol fue capaz de negarle las ocasiones a un Mallorca impreciso y poco inspirado. Los de Arrasate no estuvieron acertados a balón parado ni con el balón en juego y dejaron escapar vivo a un Espanyol que tuvo un planteamiento bastante pobre, pero que le bastó para irse con un empate al descanso.
A la vuelta de vestuarios no hubo cambios en ningún equipo y el contexto del partido no varió, las imprecisiones del Mallorca no permitían a los locales aprovechar el dominio y el Espanyol estaba cómodo defendiendo el resultado. Tuvo cinco minutos en campo contrario el cuadro visitante y acumuló varias jugadas a balón parado, uno de los puntos fuertes de los de Manolo González. Finalmente, en un córner buscando al primer palo el Espanyol encontró premio, Muriqi remató desequilibrado y mandó el balón a su propia portería para poner un 0-1 para el Espanyol, que aun no había disparado a portería. Si con 0-0 el Espanyol no tenía en sus planes buscar la portería contraria, con 0-1 le regaló la iniciativa al Mallorca, que ya con más prisa empezó a buscar balones al área. En una de esas y después de unos buenos minutos Mojica cayó después de una segada de El Hilali y el colegiado señaló el primer penalti, muy claro, del encuentro. Muriqi, que esta temporada había metido dos y había fallado uno, cogió aire y buscó la esquina inferior izquierda, encontrándose con un Joan García inconmensurable. Se hizo el silencio en el feudo bermellón, pero no dejó de intentarlo el equipo y muy poco tiempo después un centro pasado de Darder encontró la cabeza de Asano, el japonés peinó con maestría y esta vez sí, igualó la contienda. Con el empate, merecido, en el marcador y la inercia positiva el Mallorca se lanzó a por la victoria. La insistencia dem Mallorca tuvo sus frutos y las ocasiones y los acercamientos se sucedían, incluso pareció que iba a poder adelantarse después de que se señalase un penalti por mano de Kumbulla que incomprensiblemente corrigió el VAR. Esa decisión frenó el ímpetu del Mallorca y Arrasate refrescó el equipo dando entrada a Abdón, Mascarell y Valery. Ni los cambios lograron que el Mallorca siguiese atacando con peligro, pero cuando ya se acercaba el final del encuentro con empate en el marcador el Espanyol cometió un penalti más después de que Cabrera resbalase con la mala suerte de derribar a Abdón. El de Artá fue el encargado de lanzar la pena máxima. Cambió el lado el nueve mallorquinista y también se tiró hacia el otro lado Joan García, que paró el penalti y tuvo tiempo también para negarle el gol a Valjent en el rechace con un paradón. El meta catalán se erigía como el héroe del encuentro cuando, vía VAR, el colegiado volvía a señalar el punto de penalti en una decisión dificilísima de entender. A falta de apenas minutos Muriqi volvió a coger la responsabilidad. Joan García volvió a adivinar el costado, pero esta vez el kosovar puso el balón en la escuadra para llevarse los tres puntos el delirio a Son Moix. El partido se fue hasta el 102’ sin que pasase nada reseñable y el Mallorca vencía al Espanyol después de un loco final.
Se sabía desde hace ya muchas jornadas, pero había que confirmarlo en términos de puntuación. El Mallorca sumará su quinta temporada consecutiva en 1ª División y quién sabe si con una aventura europea de por medio.