El Mallorca está en la decimoséptima posición con ocho puntos en diez jornadas. Es cierto. Solo ha ganado un encuentro de los diez que ha disputado. Es cierto. Encaja más que el año pasado. Es cierto. Solo está dos puntos por encima del descenso. Es cierto. No ha ganado en sus cuatro primeros partidos en Son Moix. Es cierto. Sí, Javier Aguirre salvará al Mallorca.

Hay demasiadas razones y datos para pensar que esta temporada está saliendo y acabará mal. Y, aunque tengáis razón, tengo muchísima fe y confianza en que el Mallorca conseguirá revertir la situación. Estoy completamente seguro de ello. Este equipo tiene buenos jugadores, un gran entrenador y sobre todo, alma y honestidad en el terreno de juego. 

Desde que sigo al Mallorca solo he vivido dos descensos de segunda a primera división. Y las sensaciones son infinitamente mejores que aquellas temporadas. La temporada del declive, liderada por Caparrós en el terreno de juego y Serra Ferrer en los despachos, fue una oda al desastre que se le avecinó durante casi una década al club. Y después, la segunda vez, Maheta Molango destrozó con una planificación nefasta la temporada de Vicente Moreno en primera división. Nada se puede comparar con esta temporada.

A lo que me refería: el Mallorca se salvará. Eso es. Esa es mi opinión y mi convicción. Cansado de explicar la buena plantilla, mejor que la temporada pasada, aunque con un peor once inicial, esta vez las emociones, las sensaciones y el desempeño en el terreno de juego me tranquilizan. No veo a un equipo entregado, ni que cometa errores groseros atrás ni delante. Es un equipo bien trabajado que todavía debe ensamblarse un poco más. Sí, eso es. Necesita todavía un poco más de tiempo. 

En ningún otro año hubo jugadores tan diferenciales como Cyle Larin, Vedat Muriqi, Darder, Rajkovic, Samú Costa y Raíllo, además de la lucha, entrega y sacrificio de Antonio Sánchez, Gio González y Abdón Prats combinada con la inteligencia y todavía el buen hacer de Javier Aguirre, lograrán, una vez más, la salvación para el Mallorca.