Sí, es de verdad. La selección española femenina se ha metido esta mañana en la final del Mundial después de vencer a Suecia por 2-1. En un partido donde las españolas fueron superiores, tuvieron que esperar hasta los últimos 10 minutos para certificar la clasificación. Salma Paralluelo y Olga Carmona fueron las autoras de los goles que consumaron el pase, con la guardameta mallorquina Cata Coll siendo clave.
Esta vez era a un horario más asequible, las 10:00, cuando daba comienzo el primer partido de semifinales. El Mundial ya era histórico para nuestra selección, ya que en ningún torneo anterior habíamos pasado una eliminatoria, pero con estas jugadoras no se podía dejar de soñar. Golearon a Suiza, vencieron a Países Bajos en la prórroga y hoy querían repetir, querían meter a España en la final de un Mundial. 13 años han pasado desde que Puyol llevase a la selección española a la final de Sudáfrica con ese gol de cabeza ante Alemania. Hoy, han sido ellas.
La selección española empezó dominando desde el principio, algo que se prolongó durante prácticamente toda la primera parte. Aun así, las ocasiones no terminaban de llegar, por lo que fueron las suecas las que metieron el miedo en el cuerpo de las españolas. Los últimos cinco minutos de los primeros 45′ fueron un ejercicio de resistencia, tanto para nuestra defensa como para Cata Coll, que tuvo que intervenir -siempre con éxito- en varias ocasiones. Por ello, el resultado después del primer periodo era de empate a cero.
Para la segunda mitad, hubo un momento que lo cambió todo, y ese fue la entrada de Salma Paralluelo. La goleadora de los cuartos de final quería volver a convertirse en heroína. Con ella en el campo, las centrales suecas tuvieron mucho trabajo, lo que facilitaba el desempeño de otras futbolistas, ya sea Jenni, Mariona, Alba Redondo… Los minutos pasaban, pasaba el 80′ y todo seguía igual hasta que, después de un centro de Jenni Hermoso y varios rebotes, Salma mandaba el balón al fondo de la red. Otra vez ella. Tocada por una varita. España se veía en la final.
Del éxtasis pasamos a la tensión de nuevo cuando, poco después, Suecia empataba el partido. Igual que contra Países Bajos, España no supo gestionar los minutos inmediatamente posteriores al gol, volviendo a la igualdad en el marcador. Eso sí, la selección no parecía querer otra prórroga. En un córner, Tere Abelleira la tocaba en corto para Olga Carmona, quien, desde fuera del área, disparaba hacia la portería de Musovic, incapaz de parar el esférico. En el 89′, España volvía a ponerse por delante. Ya estaba, trabajo hecho. Así se llegaba al final del encuentro y a la final de la competición. España se había clasificado para la final del Mundial por primera vez en su historia.
Mariona Caldentey, que como hizo en los cuartos de final, dejó una muy buena actuación, está en la final de un Mundial. Cata Coll, que llegó a Nueva Zelanda como la mayor sorpresa de la lista, fue titular y clave para que no se adelantasen las suecas. Ella también estará en la final, seguramente defendiendo la portería española. Y, por supuesto, sin olvidarnos de Patri Guijarro, que sigue luchando por mejoras, o Maitane, que volvió a vestir la camiseta de la selección a finales de 2022. También hay que acordarse de Virginia Torrecilla, claro, que ha sido parte de la evolución de esta selección. Hay que remarcar el nombre de todas ellas, porque han sido las principales artífices de todo esto.
Ahora, queda el último paso. Un partido más. En tal solo unos días, ante miles de personas en Sídney, España peleará con Inglaterra o Australia por una estrella, una que significaría mucho para las 23 futbolistas que defienden nuestra camiseta, pero también para el fútbol femenino de nuestro país. Con infinitas dificultades y trabas de parte de mucha gente -e instituciones-, el fútbol femenino español sigue creciendo a pasos agigantados. Un paso más para ser las mejores del mundo.