El RCD Mallorca B sumó un punto en su visita a la UE Olot tras empatar a cero. Los de Julián Robles jugaron un muy buen partido, pero el travesaño y el guardameta rival evitaron el gol bermellón. Pere Joan también se vistió de héroe para detener un penalti en la primera mitad. El conjunto mallorquinista llegaba al último encuentro del año después de conseguir una importante victoria en casa ante el Lleida Esportiu. De la misma forma entraron en casa de un UE Olot necesitado de puntos.

El partido empezó mal para los bermellones y es que antes de la primera media hora de juego, el árbitro señaló pena máxima para los catalanes. Pere Joan se puso el mono de trabajo, adivinó y paró el penalti para seguir con 0-0 en el marcador.

Antes de llegar al descanso, los locales se quedaron con un jugador menos por la expulsión de Gonzalo Pereira. Era el momento perfecto para que los pupilos de Robles dieran un paso adelante para ganar el partido. Justo después de dicha expulsión, Tòfol Montiel lo intentó con un gran chut, pero se encontró con el larguero de la portería de Batalla. También estuvo cerca Miquel Llabrés de lograr el gol vía libre directo, pero sin fortuna.

Tras el descanso los bermellones lo siguieron intentando, pero no lograron estrenar el marcador para conseguir tres puntos que hubieran dejado al filial balear a tan solo un punto de los puestos de fuera del descenso a TerceraRFEF. Con este nuevo empate, el RCD Mallorca B sigue en la zona roja de la clasificación del GIII de SegundaRFEF y ya piensa en el 2023.