Hasta diez partidos ha jugado el RCD Mallorca a las 14h esta temporada. Un horario maldito, y a los datos nos ceñimos. Por un motivo u otro, el equipo bermellón se ha abonado a una franja horaria nada común en la historia del fútbol. El guiño claro a los aficionados asiáticos es más que palpable. Las figuras de Take Kubo y Kang-In Lee mueven masas en Japón y Corea respectivamente, por eso LaLiga se ha cebado con el Mallorca en ese sentido. La entidad balear nunca ha mostrado disconformidad con dicha situación, o al menos de manera pública. Hasta la fecha, hablamos de la presente temporada, ya son diez encuentros en los que el Mallorca ha disputado un partido a las 14h, y de esos choques no ha conseguido ganar ninguno: tres empates y siete derrotas. El sábado ante el Granada habrá una nueva oportunidad de dejar atrás la maldición.

Al Mallorca no se le da nada bien el horario. Históricamente, y tal como apunta Xesc Ramis -entre otros- en Twitter, el equipo balear nunca se ha adaptado a jugar a las dos de la tarde. Esta temporada, como se ha dicho anteriormente, ya son diez partidos; pero ampliándolo un poco más, son 13 partidos oficiales en los que el Mallorca ha jugado -y nunca ganado- a las 14h. A los de esta temporada les debemos sumar uno disputado la temporada pasada en Segunda División (1-2 vs. Espanyol en Son Moix); y dos hace dos campañas, con Vicente Moreno en el banquillo, y en Primera (2-2 vs. Celta en Balaídos y 3-1 vs. Athletic Club en San Mamés). En definitiva: 13 partidos, 4 empates y 9 derrotas.

Los partidos de esta temporada que el Mallorca ha jugado a las 14h:

  • 0-0 vs. Villarreal
  • 2-3 vs. Osasuna
  • 2-2 vs. Valencia
  • 1-1 vs. Cádiz
  • 4-1 vs. Granada
  • 2-0 vs. Levante
  • 0-1 vs. Valencia
  • 1-0 vs. Espanyol
  • 1-0 vs. Getafe
  • 3-0 vs. Elche

Una maldición que el Mallorca quiere dejar atrás. Para ello, qué mejor que una final contra el Granada. Será un choque agónico, con la consigna bien clara: ganar o ganar. La permanencia pasa por sumar de tres este sábado, y es por ello que la entidad ha preparado también una previa a la altura de la situación: recibimiento, paella gratis y banderas repartidas por los asientos de Son Moix para animar durante todo un partido. Un Son Moix, además, que se prevé que esté a reventar. Ayer el club informaba que en taquillas solo quedaban 1.000 entradas por vender, un número que seguramente se reduzca a cero el sábado. En cualquier momento el Mallorca puede poner el cartel de ‘sold out’.

Foto: RCD Mallorca