El RCD Mallorca tiene bastante clara cuál debe ser su ruta, al menos a nivel económico. Potenciar la marca al extranjero es el objetivo prioritario de le entidad balear a corto-medio plazo. Y así lo ha reconocido Alfonso Díaz, el CEO del club bermellón, en 2Playbook. “Con los 12M€ que tenemos del CVC trabajaremos en la internacionalización, centrados en Asia y Estados Unidos», apunta. El negocio está ahí, en potenciar las figuras de jugadores como Take Kubo, Kang-In Lee y Matthew Hoppe para abordar el mercado internacional; más concretamente Estados Unidos y Asia.
Muchos hablaban que ese plus que se dio a principio de temporada a todos los clubes del panorama nacional, y que Pablo Ortells reconocía no haber necesitado para cerrar la plantilla, servirían para sí reforzarla en invierno. A momento de ahora, solo se podría plantear la incorporación de un central, siempre dependiendo de cuánto tiempo más estará Antonio Raíllo de baja. Es por ello que Díaz confirma cuál es el objetivo actual de la entidad: «La gran cantidad de turismo que llega a Mallorca nos convierte en un club muy internacional; a partir de ahí, nuestro trabajo es conseguir tener una cartera de patrocinadores que puedan ser líderes en su categoría».
Andy Kohlberg va muy en la línea de lo comentado por Díaz. El empresario americano ya explicó hace semanas a la BBC cuál era su papel y su futuro dentro de la institución del Mallorca: «El hecho de que podamos beneficiarnos y hacer cosas similares a lo que hicimos con Take en Japón, con Kang-In en Corea o con Matthew Hoppe en Estados Unidos es una especie de guinda del pastel». Para Forbes, Kohlberg también rescata el valor de la cantera y de mejorar no solo a nivel internacional, sino también a nivel local mejorando la cantera. En ese sentido, Alfonso Díaz también lo tiene muy claro y lo indica en 2Playbook; donde afirma que tienen como objetivo mejorar la Ciudad Deportiva, así como el propio estadio: “Queremos mejorar la estructura organizativa de la academia».
Lo que está claro es que el Mallorca está en buenas manos. Desde que el grupo americano liderado por Robert Sarver aterrizó en la isla, las cosas solo han ido a mejor. Al menos a nivel económico: Sarver ha destinado 43M€ desde su llegada en 2016, de los cuales más de 25M€ han sido para terminar con una deuda que casi provoca la desaparición del club mallorquín.