El Palma Futsal no pudo sumar ante un Barça que se adelantó hasta en dos ocasiones. Los de Vadillo lo intentaron de todas las maneras posibles, pero Dídac y los palos frenaron a un conjunto mallorquín que realizó una gran segunda parte con múltiples ocasiones.

Barça y Palma Futsal se enfrentaban en lo que era el partido de la jornada de la Primera División de LNFS y desde el principio del encuentro se hizo palpable la tensión e igualdad entre ambos conjuntos. Los primeros compases del partido fueron la representación exacta de lo que se dejaba ver en la clasificación y la racha de ambos equipos. Con un gran respeto y con las ideas claras y marcadas por cada bando, el Barça parecía ser el que se sentía más cómodo y más cerca de la portería rival. Aún así, Raúl Campos fue el protagonista de la primera acción clara del partido, cuando solo delante de Dídac no pudo superar al meta culé y la paró. Después de esta acción, el conjunto catalán cogió la manija del partido y empezó a generar y disfrutar de ocasiones de gol que, o bien salían desviadas, o bien conseguía parar Fabio. La entrada de Vilela dio un toque de aire fresco al Palma Futsal, quien vio como el brasileño acaparaba todas las acciones ofensivas visitantes. No logró materializar ninguna, y en una acción a la contra el Barça consiguió estrenar el marcador. Matheus recibió en el punto de penalti y, con un gran control, regateó a su defensor y a Fabio para marcar a placer. El gol no cambió la dinámica del partido, aunque el Palma subió líneas y tuvo más acercamientos a la portería local.

En la segunda parte los hombres entrenados por Antonio Vadillo salieron con otra cara. Así como en la primera tenía dificultades para llegar a la portería contraria, en ésta consiguió dar fluidez y velocidad al juego, hecho que le facilitó llegar con más claridad a la meta de Dídac. Primero fue Joao el que probó al portero catalán con una doble ocasión, y más tarde fue Vilela, quien sí logró superarlo. El brasileño, tras muchos intentos, disparó desde media distancia con un disparo cruzado a la escuadra del equipo culé, al que nada pudo hacer el guardameta local. El Palma Futsal ponía las tablas en el marcador y, lo más importante, parecía tener el control del partido en esta segunda mitad. Los visitantes seguían atacando y gozaban de oportunidades claras para avanzarse y dar la vuelta al electrónico. Aún así, el Barça seguía llegando a cuenta gotas, y fue en una de estas cuando desequilibró, de nuevo, el marcador. Daniel cogió el balón en su propio campo, corrió hacia la portería de Fabio molestado por Vilela y, cuando estaba a tres metros del portero, cruzó el balón al que no pudo llegar el guardameta del equipo balear. Los de Vadillo se volvían a ver por debajo del marcador, y esta vez cuando más bien estaban sobre el parqué. El gol no influyó en la actitud del equipo visitante, que lo siguió intentando de todas las maneras. Lolo envió un balón al palo antes de que el colegiado del partido perdonase la segunda amarilla a Marcenio tras una falta, que no pitó a Higor. El Palma Futsal lo probó con portero jugador y fue un aluvión ofensivo hacia la portería de Dídac, aunque se llevó algún que otro susto con disparos del Barça en los que la portería balear estaba libre. El juego de cinco fue muy rápido y fluido y propició muchas oportunidades para el conjunto mallorquín, pero el palo y las grandes intervenciones de Dídac se opusieron al gol del Palma Futsal, que vio como la lucha y el buen juego en la segunda mitad no dio, finalmente, sus frutos.