Luis García Plaza no cambia su faceta de entrenador que va de cara, siempre. Y hoy, en la previa del partido entre el Mallorca y el Sabadell del próximo domingo, no ha sido una excepción. El culebrón con Ante Budimir aún no ha terminado. El croata sigue en la misma situación y no entrena con el grupo. García Plaza asegura que no está actuando de forma correcta: «Por lo visto sigue sin estar concentrado al 100%. Es una situación que ojalá se resuelva pronto, porque nos está lastrando. En mi opinión, Budimir no está haciendo bien las cosas». Ya no solo es contar o no con el delantero internacional con Croacia, sino que la entidad bermellona debe estar avispada y rápida para traer un sustituto. «Sabíamos que Budimir se podía ir, y si eso pasa necesitamos a otro delantero para estar con Abdón y Alegría», explica el mister madrileño. Insistiendo en la situación de Budimir, García Plaza ha querido añadir que hay otros jugadores que están en un contexto similar y que cumplen en el día a día.
De los que pueden irse, a los que vinieron. García Plaza no ha querido hablar -una semana más- sobre la posible incorporación de Cufré, pero sí lo ha hecho de Murilo (quien ya está inscrito en LaLiga y podría debutar el domingo) y Mboula. El técnico bermellón reconoce que eran dos puntos clave para confeccionar un equipo con muchas variantes: «Los dos tienen muchas ganas de jugar. Son jugadores diferentes, con un perfil que no teníamos». Por último, respecto al mercado de fichajes, ha dejado claro que hasta que no se cierre, no dará una convocatoria. Algo anecdótico, obviamente, pero que conviene recordar.
Entrando en materia deportiva. El domingo los bermellones reciben al Sabadell en Son Moix. Y la premisa es clara: solo vale ganar. «El domingo quiero ganar y sumar tres puntos. Es necesario llevarse ya una buena alegría, tanto para los jugadores como para la afición», indica García Plaza. El mister espera ver cómo -por fin- su equipo tiene suerte de cara a portería: «Hay que aprovechar todas las facetas del juego para poder marcar». Al conjunto catalán lo tiene muy bien estudiado, y lo demuestra con estas palabras: «Tiene un cambio de sistema defensa-ataque bastante bueno. Lleva muchos años con el mismo entrenador, sabe a lo que juega, con mecanismos muy bien trabajados y que salen casi de memoria». «Todo eso nos puede dificultar mucho el partido. Por ello, quiero que tengamos la pelota, pero cuando la tengan ellos debemos estar bien juntos y contrarrestarlo con presión», finaliza.