En el fútbol, como arte que es, el talento no es nada sin inspiración. Sergio Cirio y Raí son dos jugadores cargados de calidad, de esos capaces de desequilibrar un partido con un pellizco de su fantasía. Ambos, además, están últimamente inspirados y el Ibiza lo agradece. Este mediodía su idilio con las musas del balón les ha llevado a marcar dos golazos contra el San Sebastián de los Reyes, artillería suficiente para doblegar la voluntad de un colista que no lo parecía. Los madrileños salieron con una defensa de cinco –lo común entre los equipos que visitan Can Misses esta temporada– pero con claridad de ideas para sacar la pelota y apretar a la defensa ibicenca con el empuje de Pablo Aguilera y Fer Ruiz. Daba la sensación de que Josico había acertado en su planteamiento porque lo poco que ocurrió en los primeros quince minutos (un pase largo hacia Fer Ruiz que Quintanilla y Rubén se encargaron de cortar cuando el atacante sansero corría hacia el área chica) fue a favor de los visitantes.
El Ibiza creció del cuarto de hora de partido en adelante. Primero se hizo con el balón. Después comenzó a trenzar jugadas, cada vez con más peligro. Diego Mendoza, titular hoy junto a otras cinco novedades respecto al once del partido contra el Barça, se dedicaba a desgastar a los tres centrales del Sanse para que Raí y Cirio fueran puñales de la banda hacia el centro. Los celestes colgaron bastantes balones, pero el bombardeo no incordiaba a Xabier Irureta, seguro en su espacio aéreo. El riesgo real llegó por tierra. Grima conectó con Javi Pérez, que se transformó de centrocampista a delantero durante una carrera que culminó chutando al lateral de la red. Primer aviso para el Sanse. El segundo fue obra de Cirio. La definición del ‘10’ tras recoger una pelota rasa que le regaló Javi Lara al sacar rápido una falta fue casi perfecta. La pelota pasó a pocos centímetros del palo largo cuando Irureta ya estaba batido. El único tiro a puerta del Sanse en el primer tiempo (Pablo Aguilera a los guantes de Lucas Anacker) precedió al bello gol que llevó la firma de Sergio Cirio Olivares. Al capitán del Ibiza le ha costado romper su mala racha, pero ya suma tres dianas en los últimos seis partidos de Liga. El de hoy fue especialmente bonito: apareciendo desde segunda línea enganchó Cirio un buen balón centrado por Raí para ajustarla al poste derecho del arco. La estirada de Irureta no evitó la celebración celeste.
El segundo tiempo comenzó con el público aplaudiendo al saber por megafonía que 2.738 personas se habían reunido en Can Misses para ver el partido. La resaca de la Copa del Rey solamente ha tenido efectos positivos para el Ibiza que, hasta final de temporada, jugará en un rectángulo totalmente cerrado por graderío. En ese entorno más profesional el Ibiza supo desenvolverse de una forma muy eficiente. La solidez celeste se demostró cuando el Sanse atacó con una intensidad que se incrementaba según pasaban los minutos. Josico movió el banquillo en busca de variantes y Alfaro prefirió dar entrada a Rodado por Diego debido en parte a la amarilla que había visto el ariete argentino. Cuando el empate sansero no parecía una idea descabellada, Raí convirtió un balón rechazado durante un córner en un trallazo que limpió las telarañas de la portería de Irureta. El portero del Sanse solamente pudo ser espectador de uno de los goles más bellos que se marcarán esta temporada en Segunda B. El tramo final fue un paseo militar para el Ibiza, que controló los tempos y apuntó tres puntos más en su casillero. Coronada la cuesta de enero, la plantilla y el cuerpo técnico disfrutarán de dos días libres. Nunca fueron tan merecidos: el equipo no pierde en Liga desde el 24 de noviembre y encadena tres victorias seguidas sin encajar en el campeonato regular. En los siete partidos que se han jugado durante este mes solamente el Barça fue capaz de ganar al Ibiza. Y por los pelos.