Partido y victoria muy sufrida par el Atlético Baleares, que ganó en el Estadi Balear por la mínima (1-0) al Rayo Majadahonda. El partido estuvo marcado por la primera acción de peligro que supondría el gol y, a la postre, la victoria final. Cierto es que el ATB salió muy enchufado y ya dispuso de un córner a los 30” de partido. En el minuto 2, gran centro de Peris que ve desmarcado a Iturraspe. Gorka entra con todo de cabeza para marcar un golazo a la escuadra. Tercer gol del centrocampista esta temporada. Alberto Gil, que estrenaba titularidad como local (lo había sido en Getafe) brilló durante la primera mitad. Generó mucho peligro y ganó varios duelos en uno contra uno contra su defensor, al que mareó más de una vez, demostrando su gran calidad. Gil fue un puñal en la primera parte y se asoció muy bien con Borja. Además, a pesar de ser extremo, se mostró solidario en defensa. El ATB tuvo controlado el partido toda la primera mitad. En el 24’ la primera llegada del Rayo. Jesús Tamayo saca una falta directa, pero Manu bloca seguro sin complicaciones. Un minuto más tarde, gran robo de Peris en campo contrario, cede a David Haro y su disparo cruzado se va cerca del poste. Lástima. Pudo ser gol. En el 38’ Vallori hace un gran pase de 50 metros en profundidad hacia Alberto Gil, el extremo la pincha con un gran control, se va de su defensor con un gran recorte y cede atrás al punto de penalti para que Jordan dispare y la saque un defensa desde el área pequeña. Iba dentro y la jugada mereció gol. Generó muchos aplausos en la parroquia balearica. Gil ya había hecho varias jugadas de peligro y centrado algunos balones a los que Gabarre no llegaría por muy poco. Con el 1-0 se llegaría al descanso.
En la reanudación todo cambió. El Rayo Majadahonda tuvo el dominio total del esférico y del juego, acumulando muchos jugadores en campo contrario pero sin muchas ocasiones de gol. Al ATB le tocó ponerse el mono de trabajo y defender con uñas y dientes esa renta que daba el gol de Iturraspe. Y le salió bien. A pesar del doble cambio ofensivo del técnico Julián Calero, el ATB no daba concesiones en defensa, con un buen partido de todo el bloque. Jean Jules fue el mejor del Rayo, centrocampista total, cortando y mandando el jugador cedido por el Albacete. En el 62’ de partido voleó fuera desde lejos. Manix, que veía que el Rayo colgaba balones y generaba peligro, decidió hacer debutar a Óscar Gil, quien salió en el minuto 66’, jugando casi media hora ya que el partido se iría hasta el 95’. Óscar con el partido de hoy ya ha superado todo lo disputado con el Racing esta temporada, donde únicamente jugó 10’. Formó una defensa de tres centrales y no desentonó para nada. Rápido al corte y ordenado. Jon y Vallo se mostraron muy sólidos. Gran calidad la del capitán sacando con calma el balón ante la presión, igual que Aurtenetxe, recuperando su mejor versión previa a la lesión de fascitis plantar. Los minutos iban transcurriendo sin que el ATB le robara el balón al Rayo, que le permitiera montar una contra. Pero no había manera, y eso que Gabarre se bregaba en la presión. Arturo entró en el 78’ por Alberto Gil y dispuso de una vaselina alta en el 81’. Los últimos minutos se notaba la presión en la grada, conscientes de lo apurado del resultado y la importancia de esta victoria. Salió Cervero en el 88’ por Gabarre y una vez más, Manu salvó los muebles con una mano en línea de gol a una peinada del central Pulido ya en el descuento. La única ocasión real de peligro del Rayo.