Primero contra tercero. El Atlético Baleares podía terminar líder de su grupo en Segunda B si conseguía ganar el Lleida Esportiu. Fue un partidazo, pero los tres puntos se quedaron en tierras catalanas (3-2). La primera parte fue de poder a poder. Ni pasados los diez primeros minutos de encuentro, un pase en profundidad a la espalda de la defensa lo aprovecha Canario para romper el fuera de juego y anotar el 0-1 en el marcador. El gol hizo a los balearicos sentirse fuertes. Sin embargo, rozando el minuto veinte, el Lleida lograría empatar el partido. Mosa desborda por banda izquierda y hace un pase de la muerte entre la defensa y la línea de meta que empuja el pichichi del grupo Pedro Martín, ante la oposición de Rubén.

El Baleares siguió dando la cara en un partido muy bien planteado. Llegando a la media hora de partido, un buen contraataque de Canario, donde intervienen Kike López y Fullana, Marcos de la Espada volvía a poner por delante al equipo blanquiazul. Antes del descanso, el Lleida conseguí volver a poner la tablas en el marcador (2-2). Tras el descanso, el Baleares salió con el mismo ahínco. Biel Guasp y Rubén González tuvieron ocasiones para anotar un nuevo tanto, pero sus respectivas ocasiones se quedaron en nada. La ocasión más clara para el Baleares la tuvo Hugo Díaz, quien estrelló una falta en el palo. Ya en los últimos compases de partido, un pase en profundidad lo aprovecha Ortuño para superar en la espalda a Rubén y la pica con calidad ante la salida de Carl. 3-2 para el Lleida. El líder se mantiene en lo alto y el Baleares termina el año con buenas sensaciones.