Sumido en una tendencia de resultados preocupante, el Atlético Baleares de Armando de la Morena visita este próximo domingo el feudo del farolillo rojo; el Deportivo Aragón. El conjunto blanquiazul, que recientemente ha celebrado su septuagésimo quinto cumpleaños, lleva sin conseguir una victoria desde el pasado 10 de septiembre, cuando consiguió conquistar la ciudad deportiva de Paterna y traerse tres puntos de oro para la isla.
Quizá sea un buen fin de semana para disipar dudas. El Baleares debe oler la sangre de su rival a kilómetros. Porque si lo de los visitantes es crisis, lo de los locales es, de momento, una auténtica catástrofe. Cinco empates y cuatro derrotas conforman un pobrísimo balance para el filial de la Romareda que o se sumerge en una serie de resultados positivos o lo pasará realmente mal para mantener la categoría en esta Segunda División B.
Los Xisco, Fullana, Oliva y compañía saben que se la están jugando. Saben que su entrenador va a gozar este fin de semana de una de las últimas oportunidades para convencer a los pesos pesados del club que es el capitán que necesita esta tripulación y que, ahora mismo, va camino de encallar. Poder jugar con la ansiedad de un rival que necesita hacer buenos los partidos ante su gente, puede ser crucial. Una victoria es tan necesaria como el aire para respirar. Los rivales se escapan y el tren del play-off está, cada semana, más lejos.
Necesidad en Aragón. Eso es lo que se van a encontrar los chicos de Armando. Un equipo al que se le han escapado los últimos dos partidos por detalles. Ante Peralada y Santa Eulalia los aragoneses quizá merecieran más. Fue un golpe muy severo para ellos no cosechar ninguna victoria ante dos rivales directos por la lucha por mantener la categoría. Xisco avisó entre semana: «para ganar en Zaragoza debemos ser nosotros mismos y olvidarnos de contra quién jugamos». Y es así, lo mejor será que el Atlético Baleares recupere su mejor versión, que sí ha mostrado a domicilio esta temporada en campos tan complejos como el Martínez Valero de Elche.