CD EBRO | 0 | 2 | RCD MALLORCA |
EQUIPO LOCAL: Salva; Cruz, Pajarero, Diego Simón (Teo, min.74), Regino (min.74, Mainz); Álex Cruz, Adri Cuevas, Gerrit, Rubiato; Salinas y Javi Cabezas. | EQUIPO VISITANTE: Manolo Reina; Xisco Campos, Raíllo, Joan Sastre, Bonilla; Damià Sabater (min.73, Salva Sevilla), Ferran Giner, Lago Junior, Marc Pedraza; Álex López (min.85, José Ángel) y Abdón (min.65, Cedric). | ||
Goles: Álex López, 0-1 (min. 5), Ferran Giner, 0-2 (min. 15) | |||
Asistencia: 6.950 espectadores |
El Mallorca es otra historia. Ya puede competir -este año no solo juega- en un césped artificial deshidratado con superávit de caucho rodando de la peor manera el esférico, en un campo totalmente opuesto a Son Moix que a los de Vicente Moreno se despreocupan del escenario y catapultan al rival sin prácticamente réplica alguna. Los bermellones empezaron de la mejor manera posible, algo que comienza a ser la tónica de un equipo que en los primeros quince minutos puso la firma de sentencia en El Carmen. Ya en el primer toque de balón del Mallorca, rascó el primer saque de esquina y Abdón Prats, que no conquistó un tanto tras tres partidos seguidos haciéndolo, estuvo muy cerca de sorprender con gol olímpico a Salva. El arquero del Ebro no olió cuero. Álex López pegó el primer golpetazo en la mesa con un golazo imposible para el guardameta local. Lago, que volvía después del partido de suspensión, recibió en el medio campo y ningún jugador arlequinado estuvo para presionar al costamarfileño. Si le dejas metros es una sentencia indudable. Cabalgó, cedió para López y el delantero se deshizo de Alfonso para batir la portería del Ebro.
No había nadie que parara una máquina que se ubicaba en la carburación de la autoridad en el terreno de juego. Eran minutos de una superioridad excelsa. En esa condición, Joan Sastre decidió coger la mochila y prender camino recorriendo, con autopase incluido, todo el carril derecho. Levantó la cabeza y vio la flecha de un futbolista, Ferran Giner, que se ha ganado la titularidad con la pasada exhibición en Son Moix. Sastre buscó el centro raso y Giner finalizó con el segundo tanto para cerrar en cuarto de hora el encuentro. No se movería más el marcador. El Ebro, prácticamente en shock, no sabía por dónde le venían los tiros. Un campo en el que Vicente Moreno en la previa desconfiaba y mucho arrojando un discurso de dificultad y «mucha resistencia» por parte de los hombre de Emilio Larraz. El discurso se desprendió rápidamente y en solitario.
El Mallorca de Vicente Moreno iguala el arranque del Mallorca de Héctor Cúper de la temporada 98/99, cuando el técnico argentino dejó un comienzo de 9 partidos consecutivos invicto
Y es que el Mallorca, un conjunto de hormigón, desenchufó al rival y en muchas fases del partido los plomos del Ebro cayeron más de dos veces. Tanto es así, que el primer chut de los locales no llegó hasta el minuto veintinueve de juego. Un disparo completamente desviado. El acierto de los arlequinados no existía, no por falta de puntería sino por falta de llegada, topando cada vez con el muro defensivo capitaneado por Xisco Campos. Es más, no fue hasta que, a base de balones parados e interrupciones arbitrales, el Ebro pudo guionizar algunos trazos del partido una vez arrancado la segunda mitad. Fue el mejor momento de los locales, en esos tempos del partido acaparado por la interrupción y las faltas para sacar petróleo aunque El Carmen no llegaría a ser un buen campo de hidrocarburos. Asimismo, cuando más le complicó las cosas el Ebro al Mallorca ocurrió por el empuje de la zona de máquinas con nombres como Gerrit o Cuevas, donde, más tarde, el técnico zaragozano quemaría todas las naves componiendo el esquema y conformando un 3-5-2 que por la inercia los de Moreno buscaron ser más conservadores y aprovechar las oportunidades que pudiesen tener tanto Lago como el recién entrado Cedric, este último peleón aunque falto de rodaje. Antes del cambio esquemático, Giner se concedió el placer de armar un disparo desde fuera del área rival y en su costado, esta vez derecho intercambiado por Lago, que sorprendió por completo a Salva dando en el larguero y el rechace cayó rematando de cabeza el costamarfileño acabó envenenado en el palo izquierdo del portero arliquenado. Los jugadores del Mallorca, tras la parada del guardameta, reclamaron un posible gol pero el esférico no llegó a entrar del todo.
Parece que no entra del todo… pic.twitter.com/ZNbe8k8WjQ
— ¡Força Mallorca! (@RCDMLive) October 15, 2017
El tiempo jugó y lo ordenó siempre el Real Mallorca. Un Mallorca que se apunta ya nueve jornadas sin perder, igualando ya el comienzo del Mallorca de Héctor Cúper de la temporada 98/99. Es la victoria como, parece ser, algo rutinario. Además, tras la derrota de su perseguidor más cercano hasta ayer -el Elche cayó en Llagostera por 2 a 1- el Mallorca estira la diferencia y se mantiene líder, una semana más sin goles en portería -y van cinco- y también a cinco puntos del segundo, el Villarreal B que visita el próximo domingo Son Moix. Será el partido de la jornada de Segunda B.