Real Zaragoza | D16 20:30 | RCD Mallorca |
La Romareda / Gol TV, LaLiga123 TV | ||
Árbitro: Cordero Vega, Adrián |
«Todos en fila, detrás de Culio. Tomadle como ejemplo. Él no tiene por que estar aquí, pero está. No seáis cabrones y honrad su acto de compromiso. Poneos a la altura». Algo así imagina mi cabeza que dirá Barjuan antes de que los suyos salten al campo. Una cabeza mallorquinista y, por lo tanto, algo idealista. Igual demasiado.
Dudo que siga sirviendo el argumento «este partido es una final». De tanto oírlo ha perdido toda credibilidad. Ahora hay que indigar en lo más profundo del futbolista, tocar su fibra de una u otra manera. Y el gesto de Juan Emmanuel Culio puede que lo haya conseguido. La madre del argentino se encontraba realmente enferma, pero él decidió no viajar hasta su país natal para no dejar al equipo de lado. Hace cosa de días, ella fallecía y su hijo no pudo despedirse de ella. Tampoco asistirá al funeral con la intención de jugar en La Romareda, donde le esperará un caldeado ambiente por su polémica con el club año en el pasado. Gestos que honran a los futbolistas y dejan entrever su lado más humano. Todos hubiésemos entendido que marchase hacia Argentina, sin reproche alguno. Esperemos que sus compañeros le devuelvan lo que le deben sobre el campo. Lo que todos le debemos.
Es complicado adivinar por donde va a salir el Real Zaragoza. Siempre rondando entre el aprobado raspado y el suspenso por por poco, su situación clasificatoria dista de ser satisfactoria. En la duodécima posición, tan solo cuatro puntos le separan de las posiciones de descenso. Y, al igual que los baleares, tres entrenadores han rotado por sus banquillos, comenzando por Luis Milla, pasando por Raúl Agné y ahora con César Láinez, que, como Olaizola, fue ascendido desde el filial en busca de una rápida revolución.
Ya viene siendo costumbre ver al club maño comenzar los partidos de forma enérgica y solvente. Sin ir más lejos, ante el Almería anotaron sus dos goles en los primeros seis minutos de partido. Tras dicho arranque, se notan las costuras de un equipo que no acaba de creer en lo que hace, con falta de convicción en una idea. Sus principales carencias se encuentran en los laterales, los que sufren especialmente en los unos contra unos, y en la defensa de los centros laterales y balón parado. Una mina que tanto Salomao y Lago, potenciales titulares en las bandas bermellonas, deberán explotar. No obstante, cuentan con toda su pólvora en el extremo opuesto del campo, donde tanto Ángel (17 goles) como Lanzarote (6) campan a sus anchas, sustentando al equipo blanquiazul a base de dianas.
En el centro del campo, Alberto Zapater regresó a La Romareda para volver a enfundarse el brazalete. Y mandar. Un poco acusado por la edad, sigue siendo capaz de abarcar espacio y distribuir el juego como antaño, sumándole la correspondiente veteranía que supone tener 31 años y haber trotado por los mejores campos de Italia, Portugal, España y Rusia. Por delante suyo, Edu Bedia (en los últimos encuentros) y un viejo conocido. Javi Ros se ha asentado en la medular zaragozista, demostrando que hay más jugador de lo que demostró en la isla.
Si Barjuan quiere salir airoso de Zaragoza deberá cambiar cosas, bastantes. Empezando por proponer soluciones a la falta de artillería. Brandon no puede jugar como único delantero, pues ni es delantero. O bien se alinea a Lekic o Lago Junior por delante suyo o se le debe relegar al banquillo y dar entrada al serbio. En caso de escoger la segunda opción, es de cajón poner a los extremos a pierna natural, parea servir de centros a este. Realmente misterioso como ningún entrenador ha sabido, hasta la fecha, despejar la incógnita de esta sencilla ecuación.
Cambiando de tercio. Sasa Zdjelar no es mediapunta. El joven serbio debe jugar en la base del centro del campo o no jugar. Todas sus cualidades están relacionadas con el trabajo del medio centro posicional, opuestas a las de un trequartista. Ya sea junto a Culio o junto a Yuste, es conveniente que el 10 bermellón salte a la cancha, pues la estabilidad que proporciona es de gran ayuda para sus compañeros más adelantados. Él y Santamaría, quién desde que recuperó la portería se ha mostrado pletórico. Desde la isla se rezará para que este inspirado durante el domingo de Pascua.
Veteranía no les falta
Anfield, Luigi Ferraris, José Alvalade, St. James’ Park, Vicente Calderón, Mestalla y, naturalmente, La Romareda. Algunos de los campos por los que Jose Enrique, Zapater y Cani han pasado. Tres treintañeros que quieren seguir disfrutando del fútbol vistiendo la blanquiazul. A excepción de Jose Enrique, formado en el Levante, la vuelta de Cani y Zapater han sido un gesto de amor, retornando a la casa que les vio crecer.
Alberto parece ser el que se encuentra en mejor forma. A sus 31, ha jugado el 98% de los minutos, siendo el mediocampista que más tiempo ha estado sobre el campo. Además, no le pesan las piernas. Promedia 51 pases por partido, diez más que Yuste, que cuenta con los mejores registros del Mallorca.