Algunos de los soldados verdinegros. Cristian Valcárcel, Manu Cabezuelo, Juanlu Ribas, Martín Macarro y Edgar (Fotos: Fútbol Pitiuso).

Algunos de los soldados verdinegros. Cristian Valcárcel, Manu Cabezuelo, Juanlu Ribas, Martín Macarro y Edgar (Fotos: Francisco Natera).
Francisco Natera. El 11 de mayo de 2014 siempre será recordado como el día en el que dos grandes equipos de Liga Nacional juvenil, Manacor y Sant Jordi, se batieron en duelo en busca de un sueño: el ascenso a División de Honor. El rival que saldrá airoso de Na Capellera es una incógnita, pero lo que sí sabemos es que el conjunto que entrena Juanjo Cruz quiere escribir con letras de oro en la historia del club y se dejará la vida en el campo de batalla si es menester con tal de lograr el ansiado salto de categoría. El ejercito verdinegro acude a la cita mallorquina armado hasta los dientes y su objetivo no es otro que el de derrotar al enemigo en un territorio que se presenta hostil. Los soldados del Sant Jordi viajan con toda su artillería y están dispuestos a hacer volar un Na Capellera que, ni mucho menos, les recibirá en son de paz. La guerra de Manacor ha estallado y nuestro militares defenderán sus intereses con armamento pesado.
El infierno que encontrará el escuadrón ibicenco este domingo en Na Capellera no preocupa lo más mínimo a la tropa del comandante Juanjo Cruz, que ya tiene estudiada la estrategia con la que pretende derrotar al batallón capitaneado por Pep Sansó. Los oficiales jordiers hostigarán al enemigo rojiblanco en su propio terreno con destacamentos irregulares y mediante ataques rápidos y sorpresivos, subordinando todo al desgaste de un Manacor que, eso sí, venderá muy cara la derrota. Así pues, la guerra de guerrillas está servida, pero en este arte militar el Sant Jordi es todo un experto y espera no sufrir demasiadas heridas de guerra para tomar Manacor y celebrar un ascenso a División de Honor por el que suspira una afición ibicenca que se ha volcado con la milicia verdinegra.
La milicia de Gan Guerxo quiere tomar Na Capellera.

La milicia de Gan Guerxo quiere tomar Na Capellera.
Cristian Valcárcel es el máximo artillero del Sant Jordi. Con 23 goles, el tarranconense es la puna de lanza de un equipo que confiará en su calidad y pegada. El centrocampista le enchufó dos goles al Manacor en la primera vuelta y está dispuesto a dinamitar de nuevo a un adversario que únicamente ha hincado la rodilla en su feudo una vez esta temporada, ante el Son Oliva (0-1). El astro de Can Guerxo asegura que el equipo se encuentra con la moral por las nubes y con muchas ganas de que el balón empiece a rodar. “Estamos ansiosos por que llegue el partido”, afirma el jugador, que añade: “Hemos sufrido mucho y yo, particularmente, he llorado bastante al principio por las críticas que recibimos por los malos resultados. Si hemos llegado hasta aquí es por algo y vamos a morir en el campo de batalla porque este club y este pueblo merece que el equipo suba a División de Honor”.
Explica el francotirador del plantel de Las Salinas que no temen ni al Manacor ni al ambiente hostil que encontrarán en Na Capellera. Para Cristian Valcárcel el mayor peligro de esta trascendental cita radica en cómo afronte el encuentro el propio Sant Jordi. “Está claro que el rival es fuerte y se está jugando el ascenso por segunda campaña consecutiva, por lo que no nos pondrá las cosas nada fáciles. Tengo que decir, que no tenemos miedo al Manacor. Nosotros somos nuestro propio enemigo y estoy seguro que si estamos bien no nos van a parar”, matiza el futbolista, que también pone un toque de guasa al asunto. “He leído que va a arder el campo, pero también he escuchado en el tiempo que el domingo va a llover, así que no creo que vayan a quemar tanto…”.
El francotirador Valcárcel apueseta por la victoria del Sant Jordi.

El francotirador Valcárcel tiene sus rifles a punto para disparar.
Lo que sí parece claro es que el Manacor va a hacer un férreo marcaje al cañonero verdinegro, del que no se fían ni un pelo. Sabe Pep Sansó que el catalán es pura dinamita en ataque e intentará frenarle con una defensa al hombre con el objetivo de desquiciar a un jugador que asegura no preocuparle lo más mínimo la estrategia que emplee el rival para desgastarle. En este sentido, Valcárcel señala: “Me trae sin cuidado que se me pegue un rival durante los 90 minutos porque ya estoy acostumbrado; en cada partido me lo hacen y me intentan sacar del partido pegándome patadas todo el rato”. El interior sabe que no puede perder los nervios. “Tengo que estar tranquilo y sé que mi ocasión de gol llegará, así que debo estar centrado y no fallar las que tenga”, prosigue el volante, que confiesa que para él es una motivación extra que un defensa le haga la vida imposible en el campo.
En Na Capellera, además del atractivo partido en sí, también se vivirá un emocionante duelo de goleadores. El delantero centro del Manacor, Xavier Darder es el máximo artillero del campeonato con 24 goles, mientras que el de Tarragona, que suma 23, aspira a ganar este pulso de gallitos. “Piti es un buen jugador, pero no me preocupa mucho, la verdad. Al fin y al cabo sé que voy a acabar Pichichi y todo empieza por ganarle la partida esta jornada. Hay que recordar que durante la primera vuelta me llevaba más de 9 goles de ventaja porque sólo metí 8 chicharros”, resalta el centrocampista, que preguntado por si desea marcar el gol de la victoria, responde: “Estaría bien, pero yo sueño con salir campeón de este partido, independientemente de quien vea puerta. Es más, no me importaría vencer con un gol en el último minuto y en fuera de juego”.
Manu, infranqueable lateral izquierdo.

Manu, infranqueable lateral izquierdo.
Otro de los aguerridos soldados del Sant Jordi en la gran batalla de Manacor es Manu, el incombustible lateral izquierdo, que califica la cita “como la final más importante de la temporada”. Recuerda el jugador que los anteriores encuentros también han sido vitales, pero resalta que el duelo de Na Capellera puede ser histórico, ya que “podemos ascender a División de Honor, categoría que tocamos con las yemas de los dedos”. Manu sabe que el domingo el equipo tendrá que dar lo máximo ante un poderoso rival, aunque matiza que la clave radicará en “jugar como siempre y demostrar lo que somos capaces de hacer”. Por último, el zaguero explica acerca del ambiente que encontrarán en Mallorca lo siguiente: “No nos preocupa; nosotros también estaremos acompañados por afición que, aunque sea en un número menor en la grada, dará mucha guerra”.
Juanlu es el mediocentro defensivo que pondrá toda la carne en el asador para contener los avances de las líneas enemigas. El jugador asegura que encara la final de Manacor como “un partido más”, aunque es consciente de lo que mucho que se juega el Sant Jordi. Apunta el centrocampista que el grupo “lo dará todo para conseguir la victoria”, aunque destaca que la clave del partido estará en la templanza a la hora de gestionar el juego. “Los nervios van a jugar un papel importante y el rival que mejor los sepa llevar habrá dado un gran paso para conseguir la victoria”, apunta. En cuanto al aspecto que presentará Na Capellera, Juanlu matiza que será bueno para el Sant Jordi, “ya que nos puede motivar más”. “Este tipo de partidos los quiere jugar todo el mundo y seguro que se va a ver un gran espectáculo”, prosigue.
Juanlu no teme el poderío ofensivo del Manacor.

Edgar no teme el poderío ofensivo del Manacor.
El defensa confiesa no fiarse del Manacor, “un equipo que sólo ha perdido una vez en su campo en toda la temporada”. Los rojiblancos, asegura Juanlu, “son fuertes y poderosos en el juego aéreo”. “Además, se han reforzado con cinco jugadores que vienen de jugar en División de Honor, por lo que su potencial ha crecido en el último tramo de la competición”, prosigue el pivote, que prevé un enfrentamiento “tremendamente igualado”. No obstante, el joven explica que el Sant Jordi está concienciado para ganar este partido. “Vamos a darlo todo y nos vamos a dejar la piel en el campo porque estamos muy cerca de lograr un sueño. Es más, igual no estamos otro año tan cerca de lograr el salto a la División de Honor, por lo que debemos saltar a por todas”, concluye Juanlu.
Para Edgar, el lateral derecho del Sant Jordi, la gran final de Na Capellera se afronta “con muchas ganas e ilusión” porque “va a ser el partido de nuestras vidas”. El futbolista tiene muy claro que el equipo “saldrá con toda la artillería” al verde y apunta que el rival que menos fallos cometa será “el que se lleve el partido”, aunque el explica que el choque “va a ser muy duro para los dos rivales”. A Edgar, al igual que a sus compañeros, el ambiente que prepara la afición del Manacor no supone ninguna preocupación. “Nos da igual cómo estén las gradas; nosotros vamos a ir a lo nuestro, que es jugar con todas nuestras fuerzas”, prosigue el futbolista, que aplaude el esfuerzo que va a hacer parte de la hinchada verdinegra para desplazarse a Mallorca. “Es de agradecer; sentir el calor de nuestra gente nos ayudará durante el choque”, comenta.
Juanlu tiene a tiro al enemigo.

Juanlu tiene a tiro al enemigo.
Además, Edgar, sobre el potencial del Manacor, asegura que “no nos asusta”. “Sabemos que es un equipo fuerte, ya que se ha reforzado mucho y bien, pero nosotros debemos procurar que estemos bien, al máximo nivel. Si jugamos como siempre no debemos por qué fijarnos en el rival”, añade el defensa. “Confío en mi equipo y sé que lo vamos a dar todo. Es más, me gustaría remarcar que esta temporada he disfrutado mucho con estos pedazos de compañeros y he aprendido mucho de ellos. Pase lo que pase después del partido me sentiré orgulloso de haber pertenecido a esta espectacular plantilla y habrá sido todo un honor haber defendido el escudo del Sant Jordi”, concluye.
Nota: Fútbol Pitiuso agradece la colaboración de la empresa Paintball Lounge Party Ibiza por dejarnos usar sus instalaciones y prestarnos ropa militar para hacer el reportaje de fotografías que acompañan este artículo. Dar las gracias a Marian, responsable de Paintball Lounge Party Ibiza, por su buena predisposición y su excelente trato.
Martín Macarro confía en las posibilidades del Sant Jordi.

Martín Macarro confía en las posibilidades del Sant Jordi.