Orgulloso. Así definió
su estado de ánimo Guillem Llaneras tras el partido de vuelta frente
a la Sociedad Deportiva Logroñés en Las Gaunas. Su equipo, el
Constància, había quedado eliminado en la carrera por el ascenso a
Segunda División B, pero había plantado cara al conjunto
blanquirrojo.

Los mallorquines salieron
al campo con fuerza, arriesgando y dispuestos a darle la vuelta al
1-2 adverso. Disfrutaron de dos grandes ocasiones en los tres
primeros minutos, incluido un remate al palo de Gabriel Gili. Sin
embargo, ese arranque fantástico se encontró con una dura respuesta
por parte de los riojanos. Tanto que Dani Suárez, que ya había
anotado en la ida, superó a Sergio Sanz con un disparo ajustado al
palo y dejó a la Sociedad Deportiva Logroñés con un paso en la
siguiente eliminatoria.

A partir de ahí, el
partido bajó de ritmo notablemente, con algún acercamiento más por
parte de los locales. Además, al Constància se le complicó mucho
más la afrenta al filo del descanso. José Bueno vio dos cartulinas
amarillas en solo dos minutos y los baleares se quedaron con un
jugador menos.

Parecía que la SD
Logroñés tenía todo a su favor para sentenciar, pero no fue capaz
de conseguirlo. Es más, cedió la iniciativa a un Constància que
tampoco logró poner en demasiados aprietos a Jordan. Así se
encaminaba el encuentro a su final hasta que llegó la jugada que
metía de nuevo a los de Inca en la eliminatoria. Gabriel Gili anotó
una pena máxima que dejó, además, a los riojanos con un futbolista
menos por la expulsión de Laencina. Quedaba un cuarto de hora para
el final y un gol del Constància igualaba la eliminatoria. Los
baleares lo intentaron aunque muy justos de fuerzas. Incluso en la
última jugada, Sergio Sanz subió a rematar un saque de esquina,
pero los mallorquines no lograron anotar ese gol que necesitaban.
Dijeron adiós así al ascenso. Pero con orgullo, eso sí.

Iñaki Garcia y Chema Glera de LARIOJA.com para Fútbol Mallorca.