Vedat Muriqi sumaba casi 100 días sin ser titular en el RCD Mallorca. Su lesión con Kosovo fue un varapalo tremendo para el propio jugador y, sobre todo, para un equipo que vive de los goles de su ‘killer‘. Javier Aguirre, con la ausencia por sanción de Cyle Larin, no dudó: era el momento de encontrar la mejor versión de Muriqi. Y el jugador bermellón no decepcionó en absoluto. Tras reaparecer contra Girona y tener minutos ante Betis, Athletic y Real, el kosovar dio la victoria ante el Rayo Vallecano al combinado balear con un cabezazo en el descuento. El 2-1 final da al Mallorca un respiro muy necesario en la clasificación. Primero, gracias al tanto de Antonio Sánchez –el segundo del curso-; luego, con el gol de Muriqi. Con este tirunfo, el cuarto de la temporada en LaLiga, los de Javier Aguirre se colocan con 23 puntos y a seis del descenso.
La primera parte fue muy trabada. Con Munuera Montero empeñado en ser uno de los protagonistas del partido en Son Moix, el combinado de Aguirre fue incapaz de crear peligro en el área del Rayo Vallecano. El planteamiento era el de siempre, el de toda la vida. El técnico mexicano alineó su típica defensa de cinco con la ‘sorpresa’ de ver a Samu Costa en el banquillo y a Nacho Vidal estrenándose en Liga. Omar Mascarell, Sergi Darder, Antonio Sánchez y Dani Rodríguez tenían la consigna en el centro del campo de hacerle llegar balones en condiciones a Muriqi. El kosovar, en la primera mitad, no dispuso de ningún balón en esas condiciones. Tampoco el combinado visitante gozó de grandes oportunidades. Pese a que la faceta ofensiva del Mallorca era inexistente, la defensiva seguía cumpliendo las expectativas.
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— FutbolMallorca (@FutbolMallorca) February 11, 2024
Vedat Muriqi: el héroe del día
Todo cambió radicalemente en la segunda mitad. Aguirre apostó por un cambio de sistema, y el equipo dio el esperado paso adelante. La entrada de Abdón Prats siempre es un aliciente más para todos, por lo que desprende sobre el terreno de juego. En una de las primeras acciones bermellonas, Dani Rodríguez buscó la cabeza de Muriqi. En un intento de despeje de Florian Lejeune, el del Rayo asistió para que Antonio estrenase el marcador. Con el 1-0, el trabajo del Mallorca fue básico: defender el resultado. Una misión que se llevó a la mil maravillas hasta que un error en la comunicación entre Predrag Rajkovic y Gio González dio a Álvaro García la posibilidad de empatar. Y así lo hizo. Era el minuto 75, el partido estaba 1-1 y se antojaba más real el 1-2 que el 2-1. Pero Vedat Muriqi tenía un plan.
Como suele pasar ante el Rayo Vallecano, el partido se decidió en el descuento. Pasó en Vallecas, en la primera vuelta; también hace dos temporadas, con ese agónico gol de Abdón que dio alas al equipo para lograr la permanencia. En este caso era Muriqi quien iba a hacer explotar de alegría a Son Moix. Un córner excelentemente botado por Dani Rodríguez y rematado de manera magistral por el kosovar daba al Mallorca el cuarto triunfo del año en LaLiga. «Tenía muchas ganas de volver a ser el Muriqi de verdad, de volver a marcar goles. Estoy muy contento, pero toca seguir. Quiero muchísimo a la afición del Mallorca, y mi familia también. Ojalá estemos muchos años más aquí», reconocía el propio jugador nada más terminar el partido en Red Play Live.
