El RCD Mallorca recibe en casa al Alavés en una situación comprometida. A dos puntos del descenso y con tan solo una victoria en 14 partidos, el conjunto de Javier Aguirre está obligado a puntuar de tres en tres. El conjunto bermellón no convence y la afición está perdiendo la paciencia ante los últimos resultados del equipo. En cambio, los babazorros aterrizan en la isla con confianza tras ganar dos de sus últimos tres encuentros. Javier Aguirre se ha rendido en elogios ante el conjunto de Vitoria: «Tienen desparpajo, confían en su forma de jugar y les ha dado resultado».

A falta de cuatro jornadas para terminar el año, el RCD Mallorca quiere comerse el turrón alejado de la zona de peligro. Las estadísticas ante el Alavés reman a favor del conjunto de Javier Aguirre, ya que, en los últimos cinco enfrentamientos, los bermellones han logrado 10 puntos de 15 posibles (V3, E1, P1). Además, los de Vitoria aún no saben lo que es ganar fuera de casa esta temporada en LaLiga EA Sports.

El RCD Mallorca afronta el encuentro con las bajas de Muriqi por lesión y la de Dani Rodríguez por acumulación de tarjetas. Javier Aguirre ha asegurado en rueda de prensa que Antonio Raíllo está listo para jugar tras salir cojeando del partido ante el Cádiz y Maffeo es duda por molestias en la rodilla. Gio González sería su sustituto en el lateral. Por parte del Alavés, no podrán contar con el exmallorquinista, Aleksandar Sedlar.

REENCUENTROS EN SON MOIX

El partido entre el RCD Mallorca y el Alavés también estará marcado por los reencuentros. El técnico madrileño, Luis García Plaza, vuelve a la que fue su casa, donde la afición le guarda un cariño inigualable. «Volver a Mallorca es un honor, no existe otra palabra. He sido muy feliz allí», confesó en rueda de prensa. Además, también vuelve a su hogar el guardameta mallorquín, Adrián Rodríguez. Creció en la cantera del RCD Mallorca, maduró en el Real Madrid Castilla y actualmente se está afianzando en el conjunto babazorro. Sus buenas actuaciones con el filial le han llevado a ir convocado con el primer equipo y ya tiene sobre la mesa la opción de renovar cuatro temporadas más. El arquero de 22 años y 1’95m de estatura está convenciendo en Vitoria y le quieren atar en corto.

 

El encuentro de mañana supone más que tres puntos para ambos equipos. Una victoria del Alavés aumentaría el colchón de puntos con la zona de descenso y daría un soplo de aire fresco para los de Luís García Plaza. Para el RCD Mallorca, es un enfrentamiento a vida o muerte con el objetivo de devolver la felicidad a la afición y salir de la parte baja de la tabla.