Y al octavo partido del RCD Mallorca en Son Moix de la temporada, llegó la victoria. En un mar de dudas constantes, el equipo bermellón ha sido capaz de sumar el primer triunfo del curso en su feudo. Todo, en un partido que tuvo absolutamente de todo: estreno goleador de Cyle Larin, recital bajo palos de Predrag Rajkovic y con polémica incluida al anularse un tanto al Sevilla de Diego Alonso. Aún así, la resistencia local fue fundamental para la victoria. La solidez defensiva hizo de nuevo acto de presencia, como en los viejos tiempo. El 1-0 da aire al Mallorca y a Javier Aguirre, ya que los últimos resultados obligaban a cuestionar si el camino del equipo era el correcto.

Cyle Larin es, sin lugar a dudas, uno de los nombres propios de la noche. El delantero canadiense llegó a la isla con la clara intención de ser una figura ofensiva importante. Su ‘boom‘ en el Valladolid y el desembolso económico  crearon en él una etiqueta que hasta la fecha no ha podido cumplir. Su trabajo es indudable, pero el no ver puerta en Liga hasta esta jornada… La presión estaba ahí, y él mismo era consciente de ello. Pese a ver puerta en Copa del Rey, la asignatura pendiente era la competición doméstica. Ocasiones durante este inicio de temporada ha tenido, y por fin le ha llegado la recompensa: era la más difícil, pero Larin gritó gol en Son Moix.

De Larin a Rajkovic: los dos MVP en Son Moix

Otro nombre propio en clave Mallorca es Predrag Rajkovic. El portero serbio ha cuajado un partido soberbio. No solo ha logrado dejar la portería a cero por quinta vez esta temporada, sino que se ha lucido con varias intervenciones de mucho mérito. A Lucas Ocampos le logró detener dos ocasiones clamorosas; también fue capaz de desviar varios disparos lejanos muy peligrosos. En definitiva, sin Larin el Mallorca no hubiera sumado su primer triunfo en Son Moix; pero sin Rajkovic, tampoco.

Todo ello, en una situación donde el sevillismo sale de Son Moix algo perjudicado. La polémica hizo acto de presencia anulando un gol a Adrià Pedrosa. Un disparo desde fuera del área que En-Nesyri roza con el codo, desviando la trayectoria del balón. Reglamento en mano, el tanto debe anularse y así actuó el VAR. Ese momento llegó en el peor tramo del Mallorca, y tras ello los locales aprendieron la lección: supieron estar serios atrás e incluso Antonio Sánchez gozó de una gran oportunidad para poner el 2-0. Próxima parada, Almería.

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