El técnico del Real Mallorca habla en la previa del partido ante el Getafe (sábado, 18:30 horas) sobre la situación anímica de su plantilla y el rival, un conjunto difícil en un momento de necesidad por el déficit de puntos que arrastran los bermellones. La gran noticia avanzada por Javier Aguirre es el regreso de dos piezas fundamentales: Raíllo y Maffeo. Ambos, recuperados de sus respectivas lesiones, aunque no al cien por cien, entrarán en la convocatoria.
Sensaciones positivas, resultados insuficientes
“Llevamos tres o cuatro semanas, desde el partido contra el Barcelona, que no tenemos buenos resultados, pero sí buenas sensaciones. Ojalá sigamos en esa línea de juego y esperar que en ambas áreas seamos contundentes, porque con poco nos han hecho goles. Y en el área rival hemos tenido ocasiones para matar al rival y no lo hemos hecho”.
Falta de efectividad en las dos áreas
“No debemos bajar de esta línea de compromiso y actitud, que el rival no sea superior y tratar de mejorar en la definición y defender mejor. La semana ha ido enfocada a esto, en que no nos decepcionemos porque tarde o temprano llegarán los resultados. El año pasado con menos conseguíamos más y esta temporada no hemos tenido ese acierto y efectividad”.
El Getafe siempre es complicado
“Un partido de mucho contacto físico, somos dos equipos que nos gusta competir bien, correr mucho y pelear cada balón como si fuera el último. Nos van a exigir. Me espero un partido de idas y vueltas, duelos individuales y mucho equilibrio emocional. Es un rival físicamente muy fuerte”.
Javier Aguirre confirma el regreso de Raíllo y Maffeo
“La única baja es Sergi Darder, que no llega a este partido. Incorporamos a Maffeo y también a Raíllo, aunque ninguno de ellos está para los 90 minutos. Han apurado bien los tiempos, pero no están al 100%. Pueden jugar si hay alguna urgencia, porque están sanos, pero para todo el partido no”.
Partido importante para el Mallorca y Javier Aguirre
“No es una final, pero sí un partido importante porque nos puede condenar o aupar. Uno no intenta empatar, siempre ganar. Los empates hablan de la igualdad que hay en todos los partidos, excepto cuando jugamos en Girona. Tenemos lo que merecemos, no hemos hecho para merecer más por alguna razón. Culpa mía, asumo mi responsabilidad. Esperamos romper esa racha y ganar en casa”.