El Real Mallorca visita Montilivi para enfrentarse al equipo que mejor ha jugado en lo que va de inicio de temporada. Un empate y cuatro victorias para un Girona que ha sorprendido a propios y extraños y se ha colocado colíder de LaLiga. Por su parte, el Mallorca consiguió su primera victoria en Balaídos la semana pasada tras un partido en el que tampoco se vio una gran mejoría del conjunto bermellón.

Javier Aguirre ha tenido una semana para trabajar a partir de esa victoria, que siempre es más cómodo que trabajar con la presión que hubiese supuesto no ganar al Celta. Con el objetivo de mantener su tercera portería a cero consecutiva y de recuperar esa solidez defensiva que caracterizó al equipo balear en la pasada temporada. En la faceta ofensiva la buena noticia es que Vedat Muriqi, del cual dependen gran parte de las opciones del Mallorca de hacer gol, se estrenó en Vigo después de cuatro partidos sin ver puerta, con dos penaltis errados mediante.

Para que no recaiga todo el peso del gol en el kosovar es importante un paso delante de Cyle Larin, el canadiense llegó después de un largo culebrón y le ha costado encontrar una forma física idónea. No obstante, no parece que vaya a partir de inicio y Aguirre, fiel a su estilo, mantendrá el 5-4-1. Hablando de pasos adelante, uno que falta por darlo es Sergi Darder, que si bien no ha estado mal, los barralets esperan más del nuevo diez del Mallorca. Por otra parte, Van der Heyden y Lato se han hecho con un puesto en el once después de unos partidos en los que no gozaron de minutos. La entrada del belga y del exvalencianista han coincidido con las mejores actuaciones defensivas del Mallorca.

Vedat Muriqi, celebrando el 0-1 del Mallorca en Balaídos.
Foto: LaLiga

El Girona, un duro rival para el Mallorca

El Girona tiene a todas sus piezas en una forma óptima y los nuevos han aterrizado bien. Saiinho, Dobvyk o Blind, entre otros, se han hecho con un papel importante en el equipo y han sido claves en el gran inicio del conjunto gerundense. El técnico mexicano del Mallorca habrá tomado buena nota de los puntos fuertes de los de Míchel y habrá preparado una roca para contrarrestar a un Girona que seguro llevará el peso del partido ante un Mallorca que esperará sus oportunidades.

Gran reto para el Mallorca, que después de un inicio titubeante logró una victoria que seguramente no mereció en Balaídos y que aún tiene trabajo para convencer a una afición que está ahora algo más tranquila, pero a la espera de recuperar sensaciones.