Allá por la temporada 2015-2016, en clase de Reglamentos del Juego del nivel I de entrenador tuve como profesor al colegiado balear Salvador Fornés. Intentó, de todas las maneras posibles, quitarnos todo tipo de prejuicios hacia el sistema arbitral y que, además, entendiésemos las reglas y los criterios de nuestro deporte. En una de lase sesiones de clase el debate se basó en los penaltis. Parece simple; cualquier tiro libre directo que se produce en el área penal… aunque no lo es tanto. Una de las frases que recuerdo con determinación es la que el propio colegiado nos dijo: “si sancionamos una entrada en cualquier parte del campo, deberíamos hacer lo mismo dentro del área”. Quizá, es la frase de un colegiado con la que estoy más de acuerdo.

Parece que el CTA no está por la labor en este sentido y ya comunicaron que no pitarían “penaltis de baja intensidad”. ¿Y qué es baja intensidad? Se entiende que es el árbitro quien debe decidirlo, por lo que en un mismo partido debe aplicar dos criterios distintos. Para más inri, cada colegiado interpretará esa baja intensidad de manera distinta. Es un flaco favor para el colectivo arbitral, lleno de profesionales y que ya ha tenido bastante estos últimos meses.

Bajo mi criterio, y siguiendo a Fornés, si has señalado una falta, por leve que sea, en el círculo central, debes señalar lo mismo, con el mismo criterio, en ambas áreas. Alguien pensará que es la máxima pena del juego y es cierto, pero si dejamos que el criterio sea distinto permitiendo más intensidad en el juego y en las entradas estamos favoreciendo a quien no ataca y en contra del espectáculo. El favorecer al defensor siempre limita el fútbol ofensivo. Por otro lado, sería mucho más vistoso si se aplica el mismo criterio en todas las partes del campo, creo que los atacantes tendrían más ocasiones y más probabilidades de gol. Una faltita, es una infracción y si es dentro del área, debe ser penalti.

Otros deportes como ejemplo

Además, este tipo de cambio de criterio no se aplica en otros deportes. El ejemplo más claro es el balonmano; si estás dentro (incluyendo pisar la línea) de los 7 metros y se produce cualquier infracción, el castigo es lanzamiento de 7 metros. En baloncesto no te dejan de pitar una personal porque acarree tiros libres, por poner otro ejemplo.

Todo esto sin contar el tema de las infracciones por manos, que da para un capítulo aparte, y el tiempo perdido durante el partido. El espectáculo debe estar en el verde y a favor del juego ofensivo. Solo espero que a mitad de temporada no saquen la circular de turno modificando criterios porque es lo peor que le puede suceder a cualquier deporte, cambiar o modificar una norma una vez se ha empezado la competición. El tiempo nos dirá.