La historia de Jordi Mboula con el RCD Mallorca ha llegado a su fin. El jugador catalán llegó a la isla en la temporada 2020/21, con el equipo balear de Luis García Plaza en Segunda División. Ese curso sí tuvo un protagonismo relevante en las filas bermellonas, pero tras lograrse el ascenso a Primera dicho papel disminuyó considerablemente. En LaLiga, en la 21/22 y también con LGP, Mboula empezó jugando pero en el mercado de invierno hizo las maletas dirección Portugal. Esta última temporada, aún siendo jugador del Mallorca, Mboula jugó en las filas del Racing de Santander.
Pese cuajar una notable temporada con el equipo cántabro –ha jugado 35 partidos y marcado 6 goles-, su trayectoria en el Mallorca ha llegado a su final. Con contrato hasta 2024, la entidad balear ha llegado a un acuerdo con el jugador para desvincularse y, así, poder firmar con el Hellas Verona un contrato hasta 2027. El Mallorca, que pagó traspaso por el catalán hace tres temporadas no se irá de vacío, ya que conservará un porcentaje de una futura de venta.
È un piacere accoglierti nella squadra di Verona, Jordi ????????????#WelcomeToVerona #Mboula pic.twitter.com/LigUIzTltO
— Hellas Verona FC (@HellasVeronaFC) July 11, 2023
Tras la de Mboula, hay nueve salidas y solo dos fichajes
Con la de Mboula, ya son nueve las salidas que se han producido en el Mallorca durante estas últimas semanas. Hablamos de Leo Román -cedido al Oviedo-, Natija Nastasic, Ludwig Augustinsson, Ángel Rodríguez, Tino Kadewere, Dennis Hadzikadunic, Íñigo Ruiz de Galarreta, Kang-In Lee y el mencionado Mboula. Una cifra de bajas que contrasta claramente con la parcela de entradas.
Toni Lato y Omar Mascarell son las únicas caras nuevas que hasta la fecha tiene Javier Aguirre a su disposición. El Mallorca, que en dos días viajará a Austria para continuar con su pretemporada, deberá reforzar la plantilla para encarar un nuevo año en Primera División y mínimo deberá firmar un total de seis nuevos jugadores.