Un salto. Un remate. Y un gesto. Antonio Raíllo marcó con un testarazo el gol de la virtual salvación del Mallorca. Se quitó la camiseta y mostró cuán importante es para él el club del que es un baluarte. Porque para Antonio el Mallorca y Mallorca sí que es más que un equipo de fútbol y una isla.

Kang In Lee y Raíllo han marcado los goles de la remontada ante el Getafe (3-1) y que dan al equipo de Javier Aguirre los 40 puntos que, casi casi, dan la salvación al Mallorca con 10 puntos sobre el descenso a falta de 8 jornadas. Lee empató, Raíllo marcó el segundo y el surcoreano anotó otra vez a la contra y sentenció.

Javier Aguirre puso el mismo once que venció y convenció en Vigo por 0-1 ante el Celta. Ese experimento que funcionó y en el que pensó «¿para qué cambiar lo que funciona?», al inicio de la segunda parte ya entró Jaume Costa por el mediocentro reconvertido en carrilero Antonio Sánchez. 

El Mallorca salió sin la necesidad urgente de la victoria. Un empate era útil, pues punto a punto la salvación estaría más cerca. El Getafe sí salió en busca de los 3 puntos. En ganas, concentración e intensidad fueron superiores a los locales en el primer tiempo. 

Ambos entrenadores optaron por el mismo sistema de juego que a veces era un 5-3-2 y otras un 5-2-3. La primera llegada fue de los bermellones, que llegaron al área rival con Maffeo, advertían peligro, pero solo fue eso.

La primera ocasión de gol clara fue del Getafe. Un buen remate de cabeza de Ünal que se adelantó a Raíllo y que se fue cerca de la portería de Rajkovic. En el ecuador del primer tiempo Borja Mayoral, más pillo que un niño de calle, se incrustó en la distancia entre mediocentros y centrales, recibió con tiempo para pensar y desde fuera del área disparó con la fe necesaria para que después de tocar en Raíllo pusiera el 0-1.

El Getafe defendió. Bloqueó a Galarreta y el Mallorca no supo crear superioridades en campo rival. Salvo un arreón antes del final del primer tiempo. Quién más buscó, más consiguió.

En el segundo tiempo la historia cambió. Los de Aguirre ahora sí salieron enchufados. Primero avisó Muriqi con un remate de cabeza que se fue por poco tras un centro de su Robin, Kang In Lee. Y, a la segunda, el Mallorca empató. Disparó Morlanes y en el rechazo Kang In Lee batió a David Soria.

Todo estaba de cara, el Mallorca achuchaba y con Maffeo y Jaume Costa en sus bandas naturales, se zafó de la falta de ideas del primer tiempo. Y llegó el segundo con un testarazo de Raíllo a la salida de un córner que puso Galarreta.

El trabajo ya estaba hecho y, el equipo que debía atacar, carecía de ocasiones y eso que entraron Portu, Aleñà y Gonzalo Villar. A la contra y en el último minuto, Kang In Lee sentenció.

Son Moix se convirtió en una fiesta.