Sergi Darder es una de las brújulas más características del Espanyol de Diego Martínez. El centrocampista de Artà ha ido asumiendo muchos galones temporada tras temporada, convirtiéndose ya en el capitán del equipo perico. Con más de 200 partidos con el Espanyol a su espalda (también suma 23 goles y 23 asistencias), Darder es uno de los peligros más relevantes por todo su arsenal de fútbol tanto ofensivo como defensivo. En su caso, el mallorquín es incluso uno de los máximos anotadores del equipo blanquiazul: ya suma un total de cuatro dianas y solo le superan Joselu y Braithwaite. 

Este sábado encarará un nuevo reto delante de uno de los equipos más especiales para él. Nunca ha jugado en las filas del Mallorca, pero como futbolista mallorquín siempre le hace ilusión jugar contra ellos. Además, aunque no ha logrado marcar ante el cuadro bermellón, sí ha podido enseñar su magia. Por ejemplo, en los últimos dos choques entre ambos en el RCD Stadium en Primera División, ha repartido las dos asistencias que significaron dos triunfos importantes para los pericos. En ambas ocasiones, el resultado fue de 1-0. La nota positiva para el Mallorca es que el autor de esos goles, RDT, ya no está en las filas pericas.

Esta temporada Darder está siendo de lo mejorcito del combinado catalán. Diego Martínez está sufriendo mucho por culpa de las lesiones, colocándose como el segundo peor local de toda la categoría. Ahora mismo, el Espanyol se sitúa en decimotercera posición con 24 puntos; gracias, en parte, al tanto de Darder en el Martínez Valero la jornada pasada. Un gol agónico en el descuento que permite a los catalanes estar algo lejos del descenso. Pero ojo, esa distancia es de tan sólo dos puntos.

Con Abdón Prats, Artà sonríe. Con Darder, también. El pueblo mallorquín cuenta con dos grandes jugadores jugando en LaLiga. ‘Dimoni’ y mago. Aunque este sábado será complicado verlos juntos sobre el césped de Cornellà. Javier Aguirre no ha logrado mantener una regularidad en la parte ofensiva, y solo Vedat Muriqi es indiscutible para el mexicano. El mencionado Abdón se juega cada semana un hueco en el once o unos minutos en las segundas partes con Tino Kadewere, Amath Ndiaye o Ángel Rodríguez. Sin embargo, eso no impide el frenesí que la afición bermellona tiene con él. Porque en Artà hay de todo: desde invocaciones demoniacas hasta un éxtasis descontrolado llamado ‘darderismo’.

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