Abdón Prats. Vedat Muriqi. Dos jugadores que se entienden a las mil maravillas y que este pasado miércoles lograron clasificar al RCD Mallorca para los octavos de final de la Copa del Rey. El equipo de Javier Aguirre no logró ver puerta hasta la primera parte de la prórroga, y es que el Pontevedra cuajó un partido muy serio. Los gallegos, de PrimeraRFEF, forzaron al máximo a los mallorquines. Eso sí, poco pudieron hacer una vez se juntaron en el terreno de juego un ‘dimonió’ y un pirata.

«Sabíamos que iba a ser un partido difícil en un campo muy duro, pero hemos ganado que era lo importante de este partido para pasar a la próxima ronda. Ahora este lo olvidamos porque el sábado, tenemos un gran partido en nuestra casa», apuntaba el propio Muriqi ante los medios del club; añadiendo: «Soy delantero y si marcó goles y mi equipo gana, claro, muy feliz. Un gol del Dimoni y otro del pirata«.

Porque si Muriqi anotó el segundo gol, el primero lo hizo Abdón Prats. El mallorquín estrenó el marcador gracias a una asistencia del kosovar; el 0-2, fue al revés. El tándem ‘dimoni-pirata’ fluye muy bien según dice el propio Abdón: «Creo que Muriqi y yo nos entendemos muy bien. Nuestro trabajo es marcar goles. He salido muy motivado y con ganas de resolver la eliminatoria que era muy importante para nosotros ganar y pasar, sobre todo después del partido de Madrid en el que no estuvimos muy finos”.

«Sabíamos que este partido iba a ser difícil. Muchos equipos de Primera han caído contra equipos de Primera Federación. Es la línea a seguir. Debemos competir contra cualquier equipo de cualquier categoría y con humildad«, señala el de Artà.