Amath Ndiaye se reivindica. Ante el Sevilla le tocó actuar como revulsivo, pero ante la Real Sociedad se destapó como el auténtico líder de la ‘unidad B’ del conjunto bermellón. El extremo aportó algo diferente al equipo de Javier Aguirre. Se encargó de dar velocidad y desequilibrio en el ataque del Mallorca, algo que venían echando en falta los bermellones y que el senegalés, recuperado de la intervención quirúrgica a la que fue sometido el pasado 10 de agosto, sabe interpretar a la perfección.
El futbolista del Mallorca pudo dar el empate a su equipo después de una gran jugada individual y un gran remate con la izquierda, pero que el VAR acabó anulando debido a la insistencia de Iglesias Villanueva desde la sala VAR, que acabó convenciendo a Ortiz Arias sobre una falta previa de Amath en el inicio de la jugada.
“Estoy muy orgulloso y contento de volver jugar y marcar. Felicito a todo el equipo que ha hecho un gran trabajo. Nos han anulado un gol que, para mí, no fue ni falta y no fue mi intención hacerle falta. Él salta sobre mí y me golpea, creo que mi gol es merecido, lo digo con todo respeto», explicó el atacante senegalés tras el partido. “Salimos cada partido a competir, sabíamos que era un partido difícil. A seguir trabajando y luchando y ahora a pensar en Valencia», añadió en unas declaraciones a los medios del club.