A escasos días de que la selección española femenina ponga fin a su estancia en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, la RFEF organizó un acto de homenaje a las jugadoras que formaron parte de la selección en las ediciones de 1997, 2013 y 2017 de la Eurocopa. Entre las homenajeadas destaca la mallorquina y actual jugadora del Atlético de Madrid, Virginia Torrecilla, que hacía un parón en sus vacaciones para apoyar a algunas de sus compañeras.
El conjunto de Jorge Vilda parte como una de las favoritas para la obtención del título, unas esperanzas que crecieron aun más después de la goleada contra Australia. Por ello, qué mejor que juntar a las internacionales con las jugadoras que lograron el mejor resultado de nuestro país en la Euro, aquellas que formaron parte de la selección femenina de 1997, equipo que cayó eliminado en semifinales.
Una cosa está clara, junto con las internacionales y sobre todo Virginia Torrecilla, tanto Patri Guijarro como Mariona, las dos jugadoras que representan Mallorca en la selección, tienen grandes modelos a seguir de cara a la próxima Eurocopa. De hecho, Virginia fue una de las jugadoras más aclamadas cuando fue llamada al escenario, recibiendo el aplauso de las más de 40 internacionales que hicieron acto de presencia en el salón Luis Aragonés. La mallorquina rememoró sus años en la selección, la etapa en la que no pudo jugar y se dirigió a las jugadoras actuales.
«Después de todo lo que he vivido, hacer piña, equipo, ser amigas, eso es lo que vale más. Cuando la vida te pone en situaciones complicadas, lo que te quedan son las personas, que es lo que las hace grandes». Además, quiso recordar la final de la Supercopa ante el Barça, encuentro que perdió pero en el que acabó manteada por las jugadoras tanto del FC Barcelona como del Atlético de Madrid. «Los valores del fútbol femenino son muy importantes, y es algo que va más allá del deporte».
Para finalizar su intervención, quiso dirigirse a las internacionales que disputarán la Eurocopa a partir del 8 de julio. «Recuerdo en 2013, venía de jugarlo todo en el Barça y llegué a la Euro y no jugué ni un minuto. Las veteranas me decían que me calmase, y la veteranía hacía que yo me sintiese bien. Los momentos hay que vivirlos. Mañana no sabes que va a pasar, saber que la de la derecha va a hacer los esfuerzos por ti, eso es lo más importante de la vida y es lo que os va a hacer llegar lejos».
