La figura de Vedat Muriqi se está haciendo cada vez más grande en el RCD Mallorca, y no solo por lo que aporta a nivel deportivo. Su historia es muy interesante, sobre todo su infancia: el cómo vivió la guerra de Kosovo, cómo luchó por cumplir su sueño de ser futbolista profesional, etc. De todo ello habla en una entrevista en El País. Una infancia, desgraciadamente, común entre los niños albano-kosovares de los años 90. Una guerra que Muriqi nunca olvidará: «Lo único positivo de la guerra es que te hace más fuerte mental y físicamente. La guerra es lo peor que le puede pasar al mundo y a cualquier ser humano».
Sus vivencias dan para muchas lecciones. «En mi familia éramos unas 50 personas y llegamos a estar metidos todos en un habitáculo de una casa. Cuando los alemanes empezaron a prestarnos ayuda teníamos que repartir un litro de leche al día y cebollas para todos. Fueron tiempos difíciles, me daba cuenta de que mis padres sufrían, éramos niños, queríamos comer y beber y no podían darnos nada. Afortunadamente, nadie de mi familia murió en la guerra», dice el nuevo delantero del club bermellón. También recuerda cuando soldados serbios entraron en su casa y su madre empezó a hacer las maletas por una supuesta bomba: «Vinieron a casa y nos dijeron que iban a poner una bomba. Recuerdo a mi madre meter la ropa en bolsas lo más rápido posible para coger el coche e irnos a Albania. Por las calles había mucha ropa que habían tirado los soldados».
En todo este contexto, Muriqi tenía un sueño: ser futbolista profesional. «Tras la guerra no había nada, pero especialmente para el deporte. A nadie le apetecía empezar a jugar. Cuando le dije a un tío mío que quería ser futbolista profesional empezó a reírse y me dijo que era muy difícil. Luego, las cosas empezaron a cambiar, tuve suerte y trabajé muy duro para llegar a profesional. Sin esa suerte, sin lo que me ayudó mi familia y sin Dios, no hubiera sido posible».

Su llegada al Mallorca: el gesto de Salva Sevilla
Muriqi ya se ha ganado a la afición del Mallorca. No sólo por marcar en su segundo partido con la elástica bermellona, sino también por el compromiso que ha demostrado desde el minuto uno. En la entrevista que le realizan en El País, el delantero kosovar explica qué pasó con los penaltis en el partido en Son Moix ante el Cádiz: «Quise tirar el primero, los delanteros necesitan hacer goles y un penalti es una oportunidad, aunque lo puedes fallar. En el segundo no dije nada y Salva Sevilla vino y me entregó el balón. Se dio cuenta de que necesitaba marcar, es un buen tío y lo que hizo habla de su carácter, le estoy muy agradecido por darme su confianza».
Por último, explica que para que su fichaje por el Mallorca tuviese éxito, tanto Luis García Plaza como Pablo Ortells cogieron el teléfono para decirle que el equipo le necesitaba. «Tenía muchas ofertas, pero me di cuenta de que en este club trabajan todos juntos. Me llamaron directamente el director y el entrenador y me hicieron ver que me querían», finaliza.
Vedat Muriqi, en @el_pais. ?? pic.twitter.com/3GXwzmllPt
— FutbolMallorca (@FutbolMallorca) February 11, 2022