Nuevo cambio de líder en LaLiga y turno ahora para el Real Madrid. Victoria trabajada ante el Levante que le sirve para alejarse más de sus rivales después de los empates entre Barcelona y Sevilla y Atlético y Villarreal. El Betis y la Real Sociedad continúan al acecho.
El Real Madrid se encarama a lo más altodespués de una victoria que pudo ser mayor pero que en muchos minutos de la segunda mitad estuvo en el aire. Los blancos mandaron durante toda la primera mitad, maniatando a un timorato Levante que apenas podia enlazar tres pases seguidos. La presión y el hambre de los madridistas hicieron que el control siempre pasase por las botas de sus centrocampistas, con Valverde y Kroos al mando. Arriba, Benzema por el centro y Vinicius moviéndose por la izquierda fueron un quebradero de cabeza para la zaga levantina, que achicaba agua como podía. Hasta que el brasileño acertó con un bello gol casi por la escuadra. Tras un lanzamiento de esquina, el balón llegó al extremo merengue que, libre, tuvo tiempo de prepararse el esférico a su pierna buena y colocarlo en el fondo de las mallas de la meta de un Aitor completamente batido. Fue magistral su golpeo, con efecto, pero también hay que destacar la lentitud de movimientos de la defensa local, que se quedó quieta, metida dentro del área pequeña, y dejó muchos metros hasta el madridista. Un caramelo que Vinicius supo recoger con maestría. Era el premio, escaso, a una buena primera mitad grupal porque el conjunto de Zidane pudo marcharse al vestuario con el partido decidido. No se pueden errar tantas ocasiones en partidos vitales.
La segunda mitad fue distinta. El choque se abrió, el Madrid reculó y el Levante se lanzó a la desesperada en busca de un empate que pudo llegar en distintas ocasiones. Pero la falta de puntería de los atacantes valencianos, unida a la gran actuación de Courtois, un día más, dieron al traste con sus ilusiones. Ya en el desceutno, como suele suceder, el Madrid marcó el segundo tras una gran galopada de Benzema desde su campo. Victoria coral del Madrid, buenas sensaciones, tres puntos y liderato.
Cerró la jornada el mejor partido del día, Barcelona-Sevilla. Quizá fue uno de los choques más interesante que se han disputado hasta la fecha esta temporada, porque el nivel, desgraciadamente, está siendo muy bajo en general. Todo terminó en tablas pero a los diez minutos no pensábamos en eso. Ya para entonces se habían marcado los dos goles, de forma seguida, y todo hacía presagiar una noche de goles. Pero no hubo más. Ocasiones, sí, pero sin ver la red. Varios aspectos quedaron claros. Por parte del Barcelona, Griezzman ni está ni se le espera. Una noche más termino siendo sustituido y fue el jugador culé que menos intervino. Tuvo dos ocasiones que erró. Y así no puede seguir. Ya es su segunda temporada y no encuentra el sitio y, lo peor, su aportación es nula e intrascendente. Koeman tiene un problema. Además, Busquets volvió a fallar mucho y mantuvo su habitual lentitud. El canterano ya no es el mismo y también va pidiendo el relevo. Pjanic tiene que tomar las riendas, junto a De Jong. Debutó Desk en el lateral izquierdo (no es su lado) por un lesionado Jordi Alba (tres semanas al menos) y ahora tendrá más oportunidades. Y Messi. El capitán debe dar más. Se mostró en contadas ocasiones, quizá también cansado después de tres partidos en ocho días. En cuanto al Sevilla, versión muy buena y espectacular puesta en escena. Su eje central, Koundé-Diego Carlos, funciona a las mil maravillas, junto al incombustible Navas; con Jordán, Fernando y Rakitic en el centro del campo y Ocampos y Suso arriba pegándose con todos. Magnífica plantilla, plagada de grandes jugadores y muy amplia. Ahora mismo sólo está por detrás de los dos grandes, se ha comido a un Atlético que sólo pudo empatar frente al Villarreal y que en dos partidos ya ha dejado escapar cuatro puntos. Simeone sigue sindar con la tecla.
Destacaremos también las victorias del Betis en Valencia (0-2), de la Real Sociedad ante un flojo Getafe (3-0) y del Osasuna ante un débil Celta (2-0). Primer triunfo también para el Éibar en Valladolid (1-2) y el Alavés (1-0 ante un Athletic que no carbura y que puede pasarlo muy mal, con Garitano ya contra las cuerdas). Terminamos el análisis con los empates Cádiz-Granada (1-1), aunque lo más destacable fue el clarísimo, bestial, penalti no señalado a favor de los gaditanos (Alberola, en el césped, y Cordero Vega en la sala VAR, se cubrieron de gloria dejando pasar una acción clara que incluso no necesitaba ni revisión), y con las tablas, sin goles, entre los recién ascendidos Elche y Huesca.
Llega el primer parón por los encuentros de la Selección esta semana y la próxima por lo que LaLiga volverá el fin de semana del 17 de octubre. Esperemos que sin Covid-19 en los equipos y con un poquito más de fútbol. No es mucho pedir.