Parece que fue ayer cuando estábamos disfrutando del RCD Mallorca en Primera División. Es más, parece que fue antes de ayer cuando podíamos ir a Son Moix a disfrutar con el equipo bermellón. El tiempo pasa y, por desgracia, la situación no mejora. Con el equipo balear de vuelta a Segunda División, este domingo empieza una temporada atípica. No sólo los niños van a tener una vuelta al cole extraña; en el fútbol, la situación es parecida y hasta nuevo aviso no habrá público. Son Moix será un templo vacío, aunque ganar sigue siendo una obligación. La primera prueba del nuevo Mallorca es ante el Rayo Vallecano. El equipo madrileño lleva ya unas temporadas en la categoría, por lo que se antoja un encuentro frenético entre dos conjuntos que comparten objetivo: ascender a Primera División.
Una pretemporada notable, de menos a más. Luis García Plaza ha conseguido crear un bloque intenso, trabajador, unido y fuerte en defensa. Y es que los bermellones sólo han encajado dos goles en esta preparación, ambos ante el Levante. Los tres partidos restantes se saldaron con victoria balear y con la portería a cero. Un dato que se debe repetir la mayor parte de los partidos en una categoría extremadamente igualada. Además, cabe apuntar la gran cantidad de jugadores que por diversas circunstancias siguen en el equipo: los Salva Sevilla, Baba, Dani Rodríguez, Budimir -que aún sin haber gozado de minutos en pretemporada entra en la convocatoria-, Valjent, Raíllo. Jugadores que fueron clave en Primera y que, ahora, deben hacer lo propio en Segunda. A ellos, se les debe añadir los Stoikchov, Russo, Antonio Sánchez, Luka Romero, Iván Bravo, etc. En definitiva, una amplia lista de jugadores con un gran nivel que deben luchar por los puestos más altos de la categoría.
En frente, el Rayo Vallecano de Iraola. Un equipo, el madrileño, que vuelve a tener el claro objetivo de ascender a Primera División. Y lo hace con una plantilla con varios nombres propios. Mario Suárez, Advíncula, Catena, Fran García o Álvaro García se postulan como los jugadores a seguir muy de cerca no sólo esta primera jornada. En pretemporada también han ido de menos a más, ganando sus respectivos partidos ante Fuenlabrada y Leganés. No tuvo la misma suerte ante el Eibar, donde los madrileños sí cayeron por la mínima. A todo esto, no obstante, se le debe sumar una inmensa incertidumbre sobre cómo pueden llegar ambos equipos. La situación actual es la que es y la preparación física de los jugadores es una incógnita. Empezar con buen pie, por parte tanto de Mallorca como de Rayo, es clave para sus aspiraciones de ascenso.