El Atlético Baleares ha retomado los entrenamientos tras haber pasado -de forma satisfactoria- las pruebas PCR que se realizaron el pasado lunes a los jugadores, cuerpo técnico y empleados al club. En todos los casos, dichas pruebas han dado negativo. Aunque, tal y como apunta la entidad balear, aún falta por conocer los resultados de Manu Herrera y Dejan Lekic, que llegaron ayer; así como de los hermanos Shashoua y Jordan, que aterrizarán en la isla en los próximos días. Uno de los que hoy ha podido volver a pisar el césped de Estadio Balear es Gorka Iturraspe. «Después de estar tanto tiempo en casa sin poder hacer deporte y tocar balón prácticamente, al jugador de fútbol le entra mono de tocar balón», explica el jugador vasco.
«Esperemos que solo juguemos un partido, tienes la sensación de que la situación es un poco rara por hacer una pretemporada de dos meses para jugar un partido, porque esperamos que solo sea eso y no alguno más», indica un Iturraspe que ya sueña con ascender a Segunda División con el Atlético Baleares. Para ello, deberán ganar, como mínimo, un partido ante Cartagena, Logroñés o Castellón: «Me da igual el rival que nos toque, son tres equipos de mucho nivel a un partido y me da igual quién nos toque la verdad». «En Primera y Segunda tienen margen, tienen dos partidos para coger la forma, para poder fallar, con más jornadas por delante. Nosotros no», apunta Gorka. Sobre las posibles lesiones o molestias musculares durante la vuelta al trabajo dice que es inevitable: «Hemos hecho menos deporte aún este año que otros verano y es inevitable que haya
molestias».