Celta de Vigo y Real Mallorca se juegan este fin de semana más que tres puntos en el Estadio de Balaídos. La cita correspondiente a la decimoséptima jornada de campeonato doméstico tendrá lugar el próximo domingo a las 14:00 horas y el juez arbitral encargado de dirigir la contienda será el madrileño Valentín Pizarro Gómez.
No será un partido más: Celta (tercero por la cola), Mallorca (cuarto) y sus respectivas parroquias saben más que de sobra que este choque será una finalísima en toda regla. Y es que es sólo un punto el que separa a celestes y a bermellones, y con el ecuador de la temporada a la vuelta de la esquina, nada mejor que llegar a última jornada de la primera vuelta fuera de la zona roja, y más teniendo en cuenta que equipos de más abajo como el Leganés empiezan a ver poco a poco su oportunidad para revivir.
Se esperaba más de este nuevo Celta de Óscar García. El técnico catalán venía sonando desde hacía varias temporadas en tierras gallegas, pero no ha sido hasta la presente y en una delicada situación cuando su llegada al banquillo de Balaídos se ha convertido en algo real. Y salvando una gran actuación en la Cerámica, poquito. Dos derrotas, un triste empate ante el Valladolid, y la victoria ya mencionada ante el Villarreal conforman un pobre balance que, de momento, mantiene a un equipo plagado de estrellas en zona de descenso. Lobotka, Brais Méndez, Denis Suárez, Rafinha, Mina, Iago Aspas y compañía conforman una plantilla de ensueño a la que muchos auguraban un gran año. Pero nada más lejos de la realidad: 3 victorias en 16 jornadas. Con la duda de Denis por lesión y con la baja segura de Gabriel Fernández por sanción, se esperan pocos cambios respecto al último once de Óscar ante el CD Leganés.
Y por otra parte, el Mallorca. Los bermellones saben que siguen siendo el único equipo de toda la categoría que aún no ha puntuado fuera de casa, y, tras algún que otro destello de esperanza en fase ofensiva en el Camp Nou, y sobre todo, con la reciente incorporación a los activos seleccionables del ‘Cucho’ Hernández, ¿qué mejor que dar un golpe sobre la mesa en Vigo y dejar a un rival directo en una situación aún más complicada? Veremos cómo se dan las cosas para los chicos de Vicente Moreno hagan un buen papel en Galicia y vuelvan a la senda de cosechar puntos, que falta les hace y mucho. Con la principal duda del estado de salud de Lago Junior, todo parece indicar que Kubo volverá a ser la gran esperanza de los visitantes, que saben lo mucho que se juegan en esta penúltima jornada de la primera vuelta.
