Tras la batalla campal e invasión de campo producida el pasado sábado en el Municipal de Campos, ambos equipos han realizado este jueves un acto de reconciliación entre directivas, en la que se ha contado con la presencia del Presidente de la FFIB, Miquel Bestard.
Los dos clubes se han puesto a trabajar desde el primer minuto para erradicar estos comportamientos que manchan el fútbol base balear. La Penya Arrabal ha decido como actuará con su jugador, atendiendo al acta arbitral, que indica que el jugador celebró un gol provocando a la grada local, en el último minuto del partido. Por su parte, el Campos trabaja para localizar a todos aquellos que saltaron al césped y formaron parte de la violenta escena y sobretodo, para que no vuelva a suceder.
Además, será el Comité de Disciplina quien determine la sanción para los jugadores implicados y el Comité Antiviolencia de la Consejería de Deportes contra el Campos y las personas implicadas en la pelea.