Hace poco más de un mes, cuando los hombres de Antonio Vadillo cayeron por la mínima en Torrejón, muchos seguidores del fútbol sala nacional encendieron las alarmas. Encendieron las alarmas no por la derrota contra Movistar Inter, sino por no haber conseguido sumar ningún punto en las dos primeras jornadas. Además de haber anotado tan solo un gol en 80 minutos.
A mi juicio, considero que esas críticas estaban completamente descontextualizadas. Las dos derrotas iniciales fueron por la mínima. La primera incluso con desenlace polémico por aquella decisión arbitral que terminó con el gol decisivo de Levante. La segunda en casa de Movistar Inter que a día de hoy sigue invicto. Solo Ricardinho fue capaz de superar la defensa mallorquina y batiendo a Carlos Barrón.
Para mí, lo más significativo fue el hecho de no ser conscientes de las ausencias de Palma. Con Mati Rosa y Diego Quintela lesionados de larga duración, el conjunto mallorquín ‘pierde’ cerca de 40 goles. Además, Diego Nunes y Eloy Rojas, ambos decisivos en los últimos metros, también arrastraban problemas físicos.
Ante las carencias individuales en ataque, Palma necesitaba encontrar otras vías para volver a pisar la zona alta de la clasificación. Y así ha sido, Vadillo ha conseguido que sus jugadores se centren en la idea de ser un equipo desde la unidad y remando todos juntos en la misma dirección.
Gracias a este cambio de actitud, el buen juego de los mallorquines se ha transformado en goles y victorias. Todas muy trabajadas, especialmente las tres victorias en casa conseguidas con remontadas, y demostrando madurez consiguiendo empatar en casa de ElPozo Murcia y ganando en el Palau Blaugrana. Y es que después de cinco jornadas sin perder (4 victorias y 1 empate) ya han conseguido colocarse en el cuarto puesto de la clasificación, empatados a puntos con los terceros.
Una vez dando por revertido ese mal inicio y finalizada la falta de gol, Palma Futsal se enfrenta a un calendario algo menos exigente después de haber jugado contra los tres grandes fuera de casa. Tal y como dijo Vadillo, el primer error será pensar que ahora el calendario será más asequible. Pero después de haber conseguido sobreponerse a esta situación inicial, Palma se encuentra en un nivel óptimo de juego, forma y moral.