Retoma el liderato el Barcelona de la mano de un enorme Messi el día que el Madrid golea en Ipurúa -en uno de los mejores partidos del año- y la Real cede ante un buen Leganés. El trío de cabeza se convierte en dúo cuando llegamos al tercer parón antes de la Navidad. Por abajo, continúa colista el Leganés, acompañado en los puestos de descenso por Espanyol y Celta.
Messi, Messi y mil veces Messi. El argentino se encargó, él solito, de destrozar a un Celta que luchó hasta le extenuación bajo la mirada de su nuevo técnico, Óscar García, pero que tuvo que inclinarse ante los obuses del diez blaugrana a balón parado. Los equipos que se enfrentan al Barcelona, cada vez que cualquier futbolista comete una falta en las cercanías del área, tiemblan ante la presencia de Messi y la perfección que han alcanzado sus libres directos. En las últimas campañas es mejor dejar al crack argentino que lance penaltis a que golpee los tiros libres desde fuera del área. El resultado casi siempre es el mismo: gol o gol. El sábado el Barcelona no jugó bien. Lo hizo con lentitud, al tran tran, frente a un Celta en el que debutaba su nuevo técnico con un sistema de cinco defensas y cuatro centrocampistas dejando a Iago Aspas sólo en punta. La primera mitad consiguió aguantar el cuadro gallego, incluso llegó a empatar, pero en la segunda tuvo que inclinarse ante el mejor jugador del mundo y ahora también mejor lanzador de faltas. Messi es el alma del Barcelona, que no obstante y a pesar del triunfo, parece ligeramente gripado. Hubo de salir Busquets para poner orden en el centro del campo para dominar el balón. Pero la buena defensa visitante unida a la lentitud en el moviemiento del esfércio culé no auguraban buenas perspectivas. Y luego llegó el extraterrestre, el genio, Messi, para poner las cosas en su sitio y el balón en la red de Sergio. Tres goles como tres soles que permiten llegar al paréntesis a los blaugranas en cabeza a pesar de su mal juego y de ver a Valverde un poco perdido. A la vuelta deberá mejorar porque le epseran grandes rivales. Por su parte, el Celta dejó buena imagen en un partico complicado. Su nuevo entrenador llega con nuevas ideas y seguro que consigue dar la vuelta a los resultados después de ver la actuación del sábado en un estadio tan complicado como el Camp Nou.
Horas antes, en Ipurúa, el Real Madrid jugó uno de sus mejores partidos de la temporada para golear al Éibar. Fue muy superior el conjunto de Zidane, que parece ir cogiendo el tempo de LaLiga en un momento importante del campeonato. La presencia de Valverde y de Mendy dio otra prestancia al equipo, así como Lucas Vázquez, que volvió a la titularidad varias jornadas después. De Bale y James nunca más se supo y el conunto blanco parece no echarles de menos. Vinicius y Brahim también tuvieron unos minutos, como Isco, para ir cogiendo al tono en un momento importante del torneo. Zidane quiere a toda la plantilla enganchada y parece que lo está logrando. Triunfo fácil ante un Éibar que se dio por vencido antes de llegar al descanso tras encajar tres goles en veinte minutos. Así es el fútbol. Los grandes, si tienen el día, no perdonan. Por su parte, el tercer miembro del liderato la pasada semana, la Real Sociedad, no pudo pasar del empate frente a un buen Leganés en el que debutó el ‘vasco’ Aguirre en el banquillo. Fue un choque emocionante disputado bajo un aguacero infernal prácticamente los noventa minutos. Se adelantaron los donostiarras ya en la segunda mitad, pero el Lega se fue adelante con una apuesta muy arriesgada de su técnico que le sirvió para lograr el empate y al menos sumar un punto que le motiva de cara al futuro.
Se coloca tercero el Atlético después de remontar frente a un Espanyol que plantó cara a pesar de su mala situación clasificatoria. Sólo en los minutos finales los del Cholo aseguraron unos puntos importantes que le insuflan confianza para después del parón. El cuadro ‘periquito’ dejó mejor imagen pero se vuelve de vacío a casa mientras sigue en posición muy complicada y en descenso. Y ya es cuarto el Sevilla, que se hizo con el derbi frente a su máximo rival, el Betis. A la chita callando los de Lopetegui se encaraman a la cuarta plaza, a un sólo punto del liderato dejando, de paso, más que tocado a su rival y a Rubi, que cada jornada que pasa parece alejarse más del banquillo verdiblanco.
Victoria del Mallorca que le permite alejarse en cinco puntos del Celta, primer conjunto que descendería actualmente. Soplo de aire fresco para los bermellones, que respiran después de un inicio de temporada complicado. Buen partido en una mañana que se puso de cara desde el comienzo con dos goles de penalti antes de la media hora. El tanto del Villarreal al inicio de la segunda mitad auguraba nervios, pero sólo tres minutos después Kubo daba una alegría a los aficionados marcando el tercer gol que ya sería definitivo. En resumen, buen partido, mejor resultado y más lejos de los puestos complicados. El trabajo da sus frutos. También mejora el Valencia, que volvió a ganar en casa a un rocoso Granada que comienza a desinflarse. Tres derrotas consecutivas han sacado a los andaluces de los puestos europeos. Llegan los malos momentos, temidos por todos, aunque en el saco hay un buen depósito de puntos como colchón. Los de Celades, por contra, parecen estabilizarse y comienzan a dar su verdadero nivel.
Victorias de dos conjuntos vascos esta jornada. Por un lado, el Alavés se deshizo sin contemplaciones del peor Valladolid de la temporada. Garitano ganó la partida de forma contundente a Sergio, que no consiguió hacer jugar a los suyos en Mendizorroza. Paso adelante de los vitorianos, cuyo técnico no las tenía todas consigo. Y victoria también, por otro lado, del Athletic ante el Levante gracias a un gol del lateral Capa en los instantes finales. Merecieron el triunfo los vascos, que consiguieron remontar a base de fé y corazón. Además, empate entre Getafe y Osasuna que deja a ambos como estaban.