La espera, vale la pena. O eso dicen. La temporada para el Atlético Baleares está muy cerca de comenzar. Cambio de grupo (este año estarán en el Grupo I de Segunda B) y muchas caras nuevas. Sólo seis jugadores -Manu Herrera, Rovirola, Canario, Vallori, Villapalos y José Peris- y, obviamente, Manix Mandiola al mando del equipo, siguen en la entidad blanquiazul. Uno de ellos, el capitán Guillem Vallori, tiene muchas ganas de empezar este nuevo curso y, sobre todo, de volver al Estadi Balear: «Sabemos que será un año complicado. Nuevo grupo y nuevos jugadores. Durante la pretemporada nos ha faltado fluidez. Sabíamos que sería una pretemporada complicada porque solo repetimos seis jugadores del año pasado. Hemos hecho grupo y tenemos claro el concepto del entrenador». «Hay que estar tranquilos», apunta.

«El año pasado fuimos partido a partido. Tenemos que seguir en esa línea y cuando falten diez partidos ya veremos dónde estamos y por lo que luchamos», explica Vallori. El central mallorquín ha reconocido que les hubiera gustado tener más tiempo de preparación y admite que se han ganado el respeto «al estar a un gol de Segunda». Pero, dice, «hay que demostrarlo domingo tras domingo empezando por Langreo». Para ese partido, como se ha mencionado antes, habrá muchas caras nuevas. Vallori, no obstante, alaba a todos los nuevos: «Tienen un gran currículum». Por último, respecto a la vuelta al Estadi Balear, Vallori asegura que Son Malferit «le ha dado mucho a este equipo, pero el nuevo campo también debe ser un fortín». «Cambiar de estadio no debe cambiar nuestro estilo. Hay que ser constante en casa y rascar fuera», concluye.