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Marc Pedraza, jugador del RCD Mallorca, es muy cauteloso respecto al próximo partido del equipo bermellón ante el Nástic de Tarragona. El conjunto catalán ha certificado su descenso a Segunda División B, pero Pedraza reconoce que este tipo de encuentros son muy engañosos: «Estos partidos son trampa. Hay que ir a por el encuentro y sacar una victoria para seguir ahí arriba». «Tiene buenos jugadores y son un rival complicado. Cuando no tienes opciones -en este caso el Nástic no tiene opciones de permanencia- estás liberado. Tenemos los cinco sentidos puestos en ganar», explica Pedraza sobre cómo afrontan el partido del próximo sábado.

El jugador bermellón ha valorado de forma muy positiva la respuesta que el aficionado mallorquinista está dando no sólo esta temporada, sino en la anterior en Segunda B también: «Es bonito ver la euforia en la afición. Cada vez hay más gente apoyándonos y se agradece. Esto es de todos y el otro día se vio con el ambiente en el campo. El apretar de la afición se nota, la gente está muy comprometida». Quien también está muy comprometida es la totalidad de la plantilla. Jueguen o no, todos los integrantes del club están muy enchufados. Pedraza ejemplifica dicha afirmación con Àlex López o Leo Suárez, jugadores que salen del banquillo y aprovechan a la perfección sus oportunidades: «Todos entrenamos de forma impresionante. Àlex llevaba seis partidos sin ir convocado y aprovechó el momento. Pasó lo mismo con Leo en Málaga. Todos están muy enchufados y comprometidos».

Por último, Pedraza reconoce el gran momento que están viviendo. Disfrutando de los buenos resultados y viendo al Mallorca en los puestos altos de la clasificiación. No obstante, reconoce que solo piensan en ganar en Tarragona y no miran más allá: «No queremos gastar energías en pensar en el ascenso porque el fútbol es cruel. Solo pensamos en el próximo partido, en nada más». «Tenemos que creer en lo que estamos haciendo y disfrutar del momento», apunta. También destaca la buena sintonía que hay entre el cuerpo técnico y los jugadores, algo que se ve claramente reflejado en el terreno de juego: «La química entre cuerpo técnico y vestuario es enorme y eso se nota, es lo bonito que tiene este equipo».