El Real Mallorca de Vicente Moreno disputa este próximo sábado su partido correspondiente a la vigesimotercera de campeonato liguero ante el Cádiz CF de Álvaro Cervera, equipo al que el conjunto bermellón ya consiguió vencer por la mínima en una de las primeras semanas de competición oficial. Pero este Cádiz que roza los puestos de play-off no es aquel que coqueteaba con los más calientes, y eso está más que claro.

La historia no es la misma que en la primera vuelta: Álvaro Cervera, su equipo y hasta la afición del Ramón de Carranza han experimentado un proceso de notoria mejoría. Y sin mover mucha ficha, que eso es lo que importa. Cierto es que recientemente la espectacular racha de resultados se ha visto cortada por un par de resultados más bien regulares: sólo una victoria en los últimos cinco partidos. Pero el Cádiz sigue séptimo, a sólo una unidad de los puestos de play-off y con motivos más que suficientes para creer en un final de temporada en el que saborear la gloria.

Los andaluces han creído en sus mimbres y, de esos mismos, han brotado todos los argumentos futbolísticos que puede ofrecer el conjunto amarillo hoy en día: ataques basados en una contundente verticalidad, capacidad defensiva y peligro (y seguridad) constante a balón parado en ambas áreas. Y si a eso le sumamos las individualidades, la fórmula es tan brillante como envidiable. Un inexpugnable Kecojevic con el cerrojo echado atrás, un Álex Fernández con doméstica, timón y varita y un sensacional Manu Vallejo con todo lo que le hace falta a un ataque para soñar. Eso son sólo alguno de los ingredientes con los que el Cádiz puede preparar un cóctel mortal. El resto, bajo un claro 4-2-3-1 parecido a este:

Cadiz CF - Football tactics and formations

Y, en clave bermellón, muchas novedades. Para hablar de bajas debemos nombrar la más significativa: Marc Pedraza no se ha recuperado aún de las molestias que ya le dejaron fuera de viajar a Pamplona. A la del catalán hay que sumarle las de Salva Ruíz (lesión), Merveil Ndockyt (decisión técnica), Pablo Valcarce (decisión técnica) y Ferran Giner, que parece estar más dentro que fuera en este mercado invernal. Por su parte, las novedades tienen nombres propios y del este europeo: el croata Ante Budimir repite y el serbio Nikola Stojiljković aparece por primera vez en los planes de Moreno, pese a «estar falto de ritmo», como aclaró el técnico valenciano.

Al Mallorca le urge un lavado de cara urgente. De la cara ‘B’, la que se aleja de Son Moix y a penas compite. Tras dos catastróficos desplazamientos a Almería y Pamplona (con dos derrotas por 2-0 que pudieron ser peores), el conjunto mallorquín buscará remontar el vuelo para maquillar y equilibrar los balances del mes de enero, que, de perder en el Carranza, terminará con un negativo recuento de tres unidades de doce posible. Pero si alguien puede impedirlo, es este Mallorca, ya que las veces que no ha salido a darlo todo en esta liga se pueden contar con los dedos de una sola mano y porque jugar en un templo del fútbol como el Ramón de Carranza siempre apetece.