Éxtasis en Son Moix

El Palma Futsal, líder y ya equipo clasificado para la Copa de España, consiguió un triunfo épico. Mati Rosa, en el último suspiro, desequilibraba la balanza a favor de los locales en un encuentro muy igualado. Primera parte muy igualada en cuanto a intensidad. El Palma Futsal salió con las ideas muy claras y con el claro objetivo de adelantarse en el marcador lo más rápido posible. Desde los primeros instantes, Lolo buscó ese primer gol. Tres ocasiones tuvo el jugador del Palma Futsal. Sin embargo, tuvo que ser Quintela a los cuatro minutos quien estrenase el marcador. Eso sí, la asistencia fue de Lolo. Tras el 1-0 el equipo local no bajó los brazos y tuvo un sinfín de ocasiones para doblegar al Peñíscola. Taffy, Lolo y Joselito, en los primeros diez minutos de partido, pudieron anotar un segundo tanto. Los locales tenían ocasiones, pero no conseguían materializarlas.

Poco a poco, y tras ver que el Palma no anotaba, el Peñíscola empezó a reaccionar. Los visitantes hacían una buena presión y no dejaban al Palma salir con el balón jugado. Además, a base de tocar la bola, los visitantes tuvieron ocasiones para empatar. La más destacada, un palo de Orzáez a dos minutos de llegar al descanso; Claudino también tuvo una ocasión que Sarmiento solventó sin muchos problemas. Antes de ello, Taffy también estrelló el balón en la madera. Por parte del Palma, Mati Rosa, Joao y Lolo pudieron marcar ese segundo gol antes del descanso. El Peñíscola cuajó una gran priemra parte, con una buena presión y con la calma suficiente para tocar y buscar un empate que no llegó.

Nada más empezar la segunda parte Joselito tuvo una de las oportunidades más claras para el Palma, pero Molina -el portero visitante- lo impidió con una gran parada. Tras unos primeros instantes de tanteo, el Peñíscola dio un paso adelante y dominó claramente el partido. Buscó con todas sus ganas el gol del empate. Sarmiento -en varias ocasiones- y el palo lo evitaron. Ese balón al palo, lo estrelló Juan Emilio. El Palma Futsal tuvo compases de mucho sufrimiento.

Los locales intentaban anotar un segundo gol basando su ataque en los contragolpes. Tras varias intentonas fallidas, los mallorquines optaron por intentar adueñarse del balón. Aunque el ritmo ofensivo del Peñíscola bajó considerablemente, el peligro aún existía. Raúl Gómez tuvo a falta de ocho minutos una ocasión muy clara para empatar el partido. En ningún momento los locales se sintieron cómodos. Estaban todo el rato ocupados en tareas defensivas y solo Joao y Taffy estuvieron cerca de marcar un segundo gol, pero Molina lo evitó con dos paradones.

Los últimos minutos fueron de infarto. Los visitantes optaron por el portero-jugador para los instantes finales. El hecho de arriesgar dio sus frutos y el Peñíscola consiguió empatar a escasos minutos mediante Isi. Jarro de agua fría, pero por las sensaciones era algo que estaba escrito en el guion. Los visitantes se merecían un gol y ese llegó en el peor momento para el Palma. La reacción de los locales fue aún mejor. Vadillo puso a Catela de portero-jugador y el líder dio un puñetazo sobre la mesa. Taffy disparó -o centró- y Mati Rosa, en el último suspiro, consiguió una victoria más que importante. El Palma Futsal, con estos tres puntos, ya está clasificado para la Copa de España.