El Athletic Club de Cuco Ziganda ha visitado el Estadi Municipal de San Francesc para disputar la ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey ante el Formentera de Tito García Sanjuan. El partido se ha saldado con un inesperadísimo empate (1-1) del cual el modesto conjunto balear sale muy reforzado (aunque con pocas opciones de clasificación) mientras que para los vizcaínos sigue alimentando las dudas que vienen siendo habituales en los últimos meses.
La primera parte tuvo un color más que rojizo. Los menos habituales en el conjunto visitante se vieron superados por los locales, que hicieron un sacrificio enorme para, por lo menos, poder igualar fuerzas ante un gigante del fútbol español. El equipo de García Sanjuan saltó al campo sin complejo de inferioridad y aguantó un empate sin goles sin sufrir en exceso y gozando incluso de una excelente ocasión en la cabeza que Kepa sacó de la línea de gol con una soberbia estirada.
Y en la segunda parte los locales consiguieron adelantarse con un gol de Linan tras un balón parado. Poco dura la alegría en casa del pobre o eso dicen. Tardó sólo dos minutos Raúl García en igualar la contienda y en reducir en un alto porcentaje las opciones de proeza balear. El gol visitante fue una inyección de anestesia total. No hubo ni una sola ocasión más en lo que resto del partido y el electrónico final mostró las tablas.
Otra noche histórica en la isla más pequeña del archipiélago balear, donde el Formentera ha vuelto a hacer historia, pese a que, seguramente y por culpa del formato actual de esta competición, nos quedemos con ganas de más. Veremos de lo que es capaz de hacer el equipo de Sanjuan en el nuevo estadio de San Mamés, donde, desde luego, estos modestos vestidos de rojo, no tienen nada de perder y muchísimo que ganar.
FOTO: PACO NATERA