Sevilla 9 1 SD Formentera
Sevilla: Soria; Kranevitter, Rami, Kolo, Iborra (González, 86′); Ganso, Correa (Borja Lasso, 49′), Kiyotake, Sarabia; Vietto y Ben Yedder. SD Formentera: Marcos (Yebenes, 74′); Kiko, Javi Larra, Larra, Michael; Lolo (Willy, 64′), Manu, Fernando, Ojeda ; Gabri (Arián, 70′) y Juan Antonio.
Goles: 1-0: Ganso (13′), 2-0: Vietto (22′), 3-0: Ben Yedder (24′), 4-0: Sarabia (27′), 5-0: Vietto (43′), 6-0: Vietto(45′), 7-0: Ben Yedder (55′), 7-1: Gabri (61′), 8-1: Sarabia (77′), 9-1: Ben Yedder (88′)
Asistencia: 9.876 espectadores

«Vamos a bailar al son que marque el Sevilla». Las palabras de un técnico, Tito Gracía San Juan,  que vio desde la grada -sancionado en la ronda previa con el Tudelano- el partido más emotivo e importante para él y para toda la entidad del Formentera.  Unos noventa minutos para disfrutar pero que se pudo apreciar desde el primer minuto que haber llegado a los dieciseisavos y en un campo como el Sánchez Pizjuán acarrearía una vez más trabajo con una colocación y un orden que debía ser de matrícula. Si podía no ser suficiente dichas premisas, Juanma Lillo -segundo aunque más dupla de Sampaoli- estaría en contacto toda la semana con Tito García y ya en la capital andaluza le enseñó un once con todos del primer equipo -cinco de ellos estuvieron en el once inicial del  pasado sábado frente al Málaga- para enmarcar un encuentro inolvidable.

El verde, esta vez natural,  y las anchuras del campo fueron uno de los peores enemigos de los isleños. Además, y desde el primer balón que tocó el conjunto nervión se abalanzó en el campo rival y en las orillas de la portería de Marcos Contreras que a pesar de los goles encajados pudo ofrecer algún bloqueo notable como el atajado a Vietto en una estirada tras un balón con parábola desde fuera del área envenenado. Igualmente, el primer gol llegaría raudo después de numerosos avisos. No se había cumplido los quince minutos de juego y el mediapunta brasileño lanzó el primer dardo empujando en el área pequeña el balón que le concedió Correa. Después del primero llegarían dos hattricks de Vietto y Ben Yedder y los dos disparos de Sarabia.

El respeto sevillano tanto en el campo como fuera dejó un duelo donde refleja el dinamismo de los hombres de Sampaoli. Por otra parte, los formenterenses tuvieron alguna arrancada dejando jugadas para provechar como la que tuvo Juan Antonio, sevillano de cuna y especial encuentro para el futbolista, ya que su padre vistió la casaca sevillista en la década de los ochenta. Pero, tras el constante carro de goles, el Formentera se agarró al gol de Gabri aunque no persistieron el machaque del Sevilla y un rival sin poder dar a basto a todo. Fue el costado izquierdo del conjunto isleño el que más sufrió. Tanto es así que Agus Ojeda cerraba constantemente para ayudar al compañero las embestidas de Correa.

Tanto el primero como el segundo tiempo tuvieron la misma fisonomía. Los de Sampaoli no dejaban de bajar el pistón mientras que el Formentera intentaba seguir apretando las muelas y con jarabe de honor para la ocasión decidió correr sin pensar en cansancio para alargar un noche que ni Josep Marí De la Fuente «Pepín» olvidará jamás.