El de Castrofeito no rehuye del discurso que empezó a hilar desde antes de la pretemporada veraniega. Un técnico que vive a día de hoy la enésima crisis del Real Mallorca en estos últimos cuatro años inmersos en las posiciones pantanosas de Segunda División. “Solo hay un problema: el problema está en el equipo. El problema es fútbol. El problema es técnico-táctico. No hay nada más. Al equipo hay que pedirle más acierto y creo que tiene calidad para conseguirlo”, declaraba rotundamente el míster bermellón que encontraba muy normal la comunicación de los capitanes con el consejero delgado Maheta Molango: “hablar está bien, comunicarse es bueno”. Y es que ha sido una semana con el foco más fuera que dentro del terreno de juego. La lupa en hablar y reflexionar con cada uno de los integrantes de la actual situación arrastrada por unos números raquíticos –una victoria y siete de veinticuatro puntos posibles- y que por esto Fernando Vázquez medita y mucho recolocar piezas y construir una nueva formación en el tablero de juego. “No es fácil la situación. Veo que en ocho partidos mi portero Roberto hizo una parada y Jesús hizo otra el otro día. Yo en todos los partidos hice muchas ocasiones. Doblé al rival en muchas situaciones y sin embargo no gano al rival. Por tanto, ¿qué haces? No es fácil tomar una decisión”.
También el domingo se volverá a ver nuevas caras en el once inicial, al menos en lo que respecta a los lesionados Roberto Santamaría y Antonio Raíllo que serán relevados por el meta Jesús Cabrero y, presumiblemente, por Pleguezuelo aunque Vázquez soltó que Ion Ansotegui “está más adaptado con Héctor” dijo también del joven central que el próximo encuentro en Son Moix Pleguezuelo tiene “una opción clara de ser titular”. Asimismo tuvo tiempo para manifestar la recuperación y la disposición plena de Juan Rodríguez, que se antoja titular para formar un trivote que dejó de funcionar desde el empate sin goles en el Heliodoro Rodríguez López.
En cuanto al rival aragonés, Fernando Vázquez expuso que para el Huesca ganar en Mallorca “sería muy bueno” aunque “vendrán aquí presionados”. No obstante no eludió la posición del conjunto mallorquín con respecto a los oscenses: “nosotros estamos peor en la clasificación y mis expectativas son otras. Vamos a enfrentarlo sin pensar mucho en ello. Autopresionarte negativamente es malo”, argumentaba el técnico gallego que admitía del rival ser un “equipo organizado y que te va a esperar en su campo y de no hacerlo bien te van a castigar con el contraataque”. Por otro lado, Vázquez se reafirmó en su discurso indicando la plena confianza en su conjunto y la creencia de poder escalara posiciones hasta estar donde él mismo cree que puede asentarse el equipo. “Está súpercapacitado para conseguir el nivel que yo quiero que tiene que conseguir que es el siguiente, en Primera División. Y creeré hasta que me vaya de aquí, si es que tengo que irme”.