Club Gimnàstic 2 2 RCD Mallorca
Club Gimnàstic: Dimitrievski; Kakabadze, Suzuki, Lopo, Mossa; Cordero, Tejera; Ferran Giner, Juan Muñiz (Uche, 59′), Lobato (Assoubre, 55′); Álex López (S. Emaná, 72′). RCD Mallorca: Santamaría; Campabadal, Yuste (Moutinho, 75′), Raíllo, Joan Oriol; Juan Domínguez, Juan Rodríguez, Damià (Lekic, 46′); Lago Junior, Oscar Díaz (Ansotegi 64′), Brandon.
Goles: 1-0: Juan Muñiz (21′) 1-1 Brandon (46′) 2-1 Assoubre (68′) 2-2 Brandon (86′)
Asistencia: 05.731 espectadores

El Nàstic ha estado a cuatro minutos más el añadido de estrenar su casillero de victorias a costa de un Mallorca que ha tenido que empatar en dos ocasiones tantos del conjunto local. Brandon, el mejor con diferencia, ha firmado un doblete para ampliar el crédito de este Mallorca y de Vázquez.

Un rival tocado y sin victorias en su casillero ha comenzado apretando con una presión efectiva en campo contrario ante la salida de balón del Mallorca. Sin embargo, el conjunto bermellón, hoy de blanco, ha sido el primero en avisar con un remate de Joan Oriol que ha acabado dentro de la portería, pero anulado por fuera de juego en el chute de Lago Junior tras un córner. Con la misma arma, Juan Muñiz ha probado con una rosca desde la esquina que  ha tenido que sacar con apuros Santamaría.

Así han salido ambos equipos
Así han salido ambos equipos

Solo ha sido una muestra de lo que el número diez del Gimnàstic es capaz de hacer. Yuste, tras un error en el salto en medio campo, ha tenido que trabar a Álex López en la frontal. Muñiz no ha perdonado y ha clavado el libre directo lejos del alcance del portero mallorquinista.

El Mallorca, en apuros ha respondido pronto pero a escasos centímetros del acierto. Campabadal ha puesto un centro perfecto al primer palo donde Lago Junior ha ganado a su par cabeceando a la madera. El partido se ha vuelto bronco a partir de entonces, con faltas y piques entre jugadores de ambos conjuntos. Así, hasta el descanso las oportunidades han llegado tan solo a balón parado. Kakabadze en un rechace ha probado el disparo desde la frontal algo centrado, mientras que Damià hacia lo propio con un buen disparo tras un saque de falta. La más clara antes del descanso la ha tenido Juan Domínguez, tras una jugada trenzada tras falta en medio campo, donde su cabezazo final se ha perdido lamiendo la cepa del poste.

De locura se puede tildar el inicio de la segunda mitad. Ni un minuto había pasado cuando Brandon ha agarrado un balón en tres cuartos de campo. Jugada individual y gran disparo que superaba la estirada de Dimitrievski para poner el empate. Acto seguido, ha sido Álex López quien volvía a marcar por parte local, aunque anulado por fuera de juego para respiro mallorquinista.

No ha acabado ahí las ofensivas de ambos equipos. Si Campabadal ponía un centro envenenado que no se colaba por poco en la portería, Ferran culminaba una contra con un disparo al primer palo que atajaba Santamaría. Tras esos minutos iniciales, el juego se ha calmado, solo con Lekic probando fortuna en su típica jugada de bajar balón y disparar.

Pero apareció Jean Luc. Justo cuando Vázquez ha pasado a un sistema de cinco defensores, el jugador recién incorporado al terreno de juego ha dejado sentado a Oriol y los centrales para sorprender a Santamaría por el palo corto. Duro mazazo al que el Mallorca ha intentado responder a balón parado con un remate de Raíllo fuera por poco.

El técnico gallego ha tenido que recomponer al equipo y volver al 4-4-2 con el que se ha iniciado la segunda mitad. Sin embargo el Nàstic ha sabido frenar al equipo mallorquín y el juego en general. Ante esa perspectiva, la única opción era a balón parado. Tras un más que posible penalti sobre Brandon, en un saque de esquina Oriol ha jugado en corto para Moutinho. Centro a la pequeña donde ha vuelto a rematar a gol con un buen testarazo.

Parecía que podía darse por acabado el partido, pero con cinco minutos de añadido ha dado para mucho, incluido un gol anulado a los locales por fuera de juego al pequeño de los hermanos Emaná. Con todo, final del partido con tensión donde el árbitro ha tenido que marchar escoltado.