Prácticamente en su
totalidad, en el futbol profesional y semi-profesional han cambiado
las reglas del juego. Desde la creación de las sociedades anónimas
deportivas (SAD) los clubes de futbol no son tan clubes de futbol
como eran conocidos de antaño, en el que la masa social tenía al
menos una mínima potestad hacia su equipo, el que ha defendido
siempre. Ahora ya no. Actualmente existen unos señores que
gestionan clubes de futbol y que a veces pecan de inexperiencia o se
envuelven en proyectos que el contexto y el entorno les pasa una mala
factura. Ojo, están en todo su derecho de tomar las decisiones que
crean oportunas. Al fin y al cabo, ellos ponen el dinero de su
bolsillo. Pero no todo es poner porque aunque ahora los clubes se
acerquen en una similitud casi exacta como si fueran una empresa más
(Griferías Antonio o Aceros Fernández), les falta muchas veces una
variable muy valiosa. Porque detrás de las butacas del palco, de las
oficinas del club y de la junta de accionistas hay un motor que todo
el tiempo se mantiene encendido. Es un colectivo en constante
transformación. Y es la afición, un engranaje que muchos de los que
están arriba no consiguen hacer rodar en condiciones.
decisiones están en el orden del día. Cuando las cosas no van bien
es una responsabilidad determinar algún posible cambio. Pero cuando
las cosas están bien, los futbolistas creen en una idea de juego y
hay unos objetivos marcados que no se desvían del camino para
conseguirlos es muy raro, diría que contraproducente, destituir al
entrenador.
Siviero. Nadie se lo esperaba. Y uno de los motivos de que la noticia
fuera chocante es que no existía un murmullo, tradicional cuando las
cosas no están saliendo como se esperaban, ni se hablaba de una
posible destitución del argentino. Porque aunque no llevaban una
buena racha (cuatro partidos sin ganar) estaban a solo dos puntos de
las posiciones de playoff.
que iban a estar metidos en la pomada. Se lo decía a su círculo más
cercano. Ya se pensaba en algún retoque para el mercado de invierno
y las recuperaciones de jugadores clave como el delantero Chando.
Futbolista esencial para Siviero. Entonces, le llegó la noticia
justo antes de realizar la segunda sesión de entrenamiento. Fue tal
la sorpresa que, antes de que los responsables articularan palabra,
el argentino pensó que pasaba alguna cosa extradeportiva, alguna
situación personal. Ni de lejos.
cabeza alta pero con la espinita que tenía, y que aún tiene, de
poder haber subido al Baleares cuando en su primera etapa estuvo a
muy poco de conseguirlo. En su despedida, ha evidenciado que un
entrenador tiene que tomar sus propias decisiones sin estar a merced
de terceros, lo que refleja que cada uno con lo suyo y sin molestar
al vecino, para ser escueto.
jugadores, la afición y la directiva, como dicen algunos, están de
paso. El único que siempre queda allí es el club. Han tenido que
estar muy seguros para llevar a cabo tal decisión para un vestuario,
que a estas alturas, aún no debe creérselo. Bueno, a lo mejor
alguno sí. Digo que la medida tomada tiene que ser muy convincente
porque si ahora el nuevo cuerpo técnico no está a la altura de las
circunstancias, club y propietario podrá presenciar una situación
que esperemos que no se produzca. Y esta situación puede estar en
manos de aquel motor. Porque el motor es una de las piezas más
importantes del vehículo.