(Crónica): CD Mirandés 2-2 RCD Mallorca

Jornada 9. Estadio Municipal de Anduva.

3.560 espectadores

Alineaciones:

RCD Mallorca:

Timon Wellenreuther, Aveldaño, David Costas, Joan Oriol, Company
(Brandon, min.46), Sissoko, Yuste, Javi Ros, Arana (Pereira, min.46),
Campabadal y Rolando Bianchi (Coro, min.85).

Banquillo:

Cabrero, Kasim, Tià Sastre, Damià Sabater, Pereira, Brandon y Coro.

Club Deportivo Mirandés:

Raúl Fernández, Galán, Álex Ortiz, Gorka Kijera, Carlos, Rúper
(Lázaro, min.65), Salinas(Fran Carnicer, min.81), Provencio, Lago
Júnior, Ion Vélez (Abdón Prats, min.71) y Álex García.

Banquillo:

Sergio Pérez, Gaffor, Álvaro Corral, Marco Sangalli, Lázaro, Fran
Carnicer y Abdón Prats.

Arbitro: Víctor Areces Franco.

Linieres: Víctor Hugo Fernández Suárez y Jorge Paredes Gómez.

Goles:

El Real Mallorca empató a dos frente
al Mirandés en un partido que entre la primera parte y la segunda no
existió ninguna concordancia. En la segunda parte los del Chapi
Ferrer, mediante los cambios en el descanso de Pereira y Brandon,
dieron una transformación al equipo teniendo la victoria
visiblemente a favor en más de una acción desperdiciada, en el que
el tercer gol nunca llegó al marcador mallorquinista. Los
mirandeses, como ya es habitual, salieron ordenados y con las ideas
claras. Pero con el escalón ascendente que dio el Mallorca en la
segunda y sumando el partido de Copa del miércoles del equipo local,
los de Carlos Terrazas fueron de más a menos.

Esta vez sí que se jugaba y mucho en
Anduva el Mallorca. Hoy el objetivo claro era una victoria a
domicilio para escalar posiciones en la tabla y constatar así los
primeros tres puntos lejos de Son Moix. Sin embargo, el encuentro
empezó de la peor manera posible porque ya en el minuto cinco se
adelantaba el Mirandés. Fue en una de las primeras faltas laterales
del partido que colgaron los locales y Galán, solo en el área del
Mallorca, peinó y el balón llegó a las redes del equipo
mallorquín. Un error mayúsculo de marca, donde Héctor Yuste se
encontraba solo a pocos metros del goleador rival. A partir de ahí,
tocaría remar muy pronto para los del Chapi Ferrer que quedaron
aturdidos durante un largo período de tiempo.

Pasado el ecuador de la primera mitad,
el Mallorca empezaba a reconstruirse y desquitarse de la cabeza el
gol prematuro del rival para demostrar que había opciones para
empatar. El conjunto liderado por Carlos Terrazas parecía un
acordeón en el campo, con ayudas constantes, superioridad notable en
la presión al rival y basculaciones medidas de lado a lado. Fue en
el minuto 22 cuando el Mallorca tuvo la ocasión más notoria desde
que el colegiado Víctor areces Franco diera el pitido inicial. Fue
una acción que Campabadal, uno de los jugadores que más convencen
al Chapi Ferrer, abrió a Javi Ros y este centró raso esperando la
llegada de Rolando Bianchi pero el italiano, aún estirándose con el
pie, no llegó al esférico.

El conjunto mallorquín se sentía cada
vez más cómodo, pero en otra acción de ataque del Mirandés llegó
el segundo gol. Otro error del equipo bermellón, esta vez el
protagonista fue el portero Timon que en una gran errata de salida
para blocar el balón se le escapó de las manos y el esférico le
cayó a Néstor, que sin pensárselo ni un minuto disparó a portería
y complicaba aún más las opciones del Mallorca para sacar el
encuentro adelante. Pero, antes de llegar al descanso, los
mallorquines tuvieron una gran ocasión para acortar distancias por
mediación de Arana que se marchó de Galán y disparó llegando a
rozar el palo derecho de la portería de Fernández. El Mallorca se
iba al descanso cabizbajo y el Chapi ya pensaba en mover piezas.

Empezada la segunda mitad y el míster
catalán no tocó el sistema y apostó por dos cambios naturales.
Sacó a Arana y Company para meter a Pereira y el recién recuperado
Brandon Thomas. Así, los dos incorporados se colocaron en los
costados y Campabadal retrasó su posición a lateral.

A partir de los dos cambios en el
descanso, el encuentro dio un giro de 360 grados y tanto Brandon como
Michel Pereira, sin duda los dos hombres del partido,
desestabilizaron al conjunto de Miranda de Ebro en su campo. Y la
reacción se materializó muy pronto. En el minuto tres de la segunda
mitad marcó Sissoko, goleador improvisado del Real Mallorca, en una
jugada de libro. Cambio de orientación de Pereira que recibiría el
otro incorporado, Brandon, para entregársela a Oriol que llegó en
carrera y se la dio a Sissoko para disparar a portería de primera.

Entonces, fue el momento donde el
Mallorca creía en sus posibilidades de empatar el partido. Entonces,
llegaron las mejores ocasiones por mediación de los que despertaron
a sus compañeros: Pereira y Brandon. Y llegó el segundo. En uno de los
ataques de los bermellones, Pereira centró un balón medido al
segundo palo y solo Javi Ros entró para rematar con la cabeza y
poner las tablas en el marcador. Fueron los mejores momentos del
equipo mallorquín que siguió insistiendo tras el segundo gol y tuvo
ocasiones suficientes como para llevarse el partido de Anduva.
Ocasiones como la que tuvo también el capitán del Mallorca en una
impoluta acción individual de Brandon que le dejó a Javi Ros solo
frente a frente con el portero pero el guardameta rival repelió el
disparo en una gran acción. Pasaba el tiempo y Albert Ferrer se
desesperaba en cada acción desperdiciada de los suyos.

En los últimos compases del partido y
tras fallar claras ocasiones de gol, el Mirandés hizo su último
estirón juntamente con la entrada por parte del Mirandés del
mallorquín Abdón Prats, aunque la superioridad del Mallorca en la
segunda parte fue constante durante gran parte del segundo tiempo. Al
final, el Mallorca recoge un punto que sabe a poco porque esta vez sí
existió pegada pero no se trasladó al marcador con una victoria y
los tres puntos de viaje a la isla.