Opinión

El Real Mallorca tras tres victorias consecutivas y cuatro jornadas sin perder, vive quizás el mejor momento de la temporada, instalado en la décima posición a tan solo 5 puntos de la zona de play off.

Tras lograr diez de doce puntos y ganar a equipos que en la primera vuelta no pudo ganar, los bermellones viven una calma que hacia mucho tiempo no reinaba  en Son Moix.

Ya sea por el cambio de entrenador o porque los jugadores se han puesto las pilas, la verdad es que la afición vive un momento dulce viendo algo más cerca los puestos de acceso a la promoción a Primera División.

El calendario más inmediato de los mallorquinistas es: Alavés, Llagostera y Sabadell. Tres partidos que a priori los del «Nanu» Soler deben ser capaces de ganar y aprovechar los fallos de los rivales directos para acercarse más que nunca a los puestos de privilegio.

A llegado el momento de dar el golpe encima de la mesa y tirar de orgullo y pasión por un colores, para luchar por lo que hace unas pocas semanas era una utopía: luchar por la promoción.

Con el equipo enchufado y la afición a su lado, solo falta saber que rendimiento ofrecerá Riera y que Soler apueste definitivamente por un Marco Asensio que no se merece pasar por este momento.
Ahora mas que nunca todos a una con el Real Mallorca.

Guillermo Amengual