De los años de vida que
uno tiene viendo el fútbol nunca puede pasar por desapercibido a
Louis van Gaal. La Libreta inmortal, los fracasos, éxitos, es una
cosa muy impresionante.
Los cuartos de final del
Mundial 2014, además quedar inmortalizados por las lesiones y la
aparición de una Cenicienta, un cambio de porteros a diez segundos
del inicio de la tanda de penales es algo que roza en lo
inimaginable.
Un partido que debió ser
liquidado por Holanda en los 90 minutos ante una Costa Rica que
mostró su versión más defensiva en todo el torneo y que apenas
tuvo proximidad al área sagrada de Jasper Cillessen, tuvo que ser
definido en la tanda de penales. El fantasma de la retrospectiva no
era nada bueno para los Oranje, ya que nunca se habían
logrado resultados positivos en Copas del Mundo desde esta instancia
de desempate.
Ya no había nada que
hacer, eran los penales o eran los penales, lo humanamente posible
para anotar gol se hizo, pero Keylor Navas y el universo conspiró
para que los goles naranjas no lograran entrar. Parecía que era el
momento de Costa Rica para hacer historia, pero había alguien que
impediría esto a como dé lugar.
Un cambio en los 90
minutos, Jeremain Lens por Memphis Depay que se comió la banda
izquierda con ocasiones de gol y con desbordes importantes, pero se
le notó la juventud en los minutos finales, ya que el miedo es algo
difícil de disimular en una cancha de fútbol. Lens fue muy
ambicioso desde que ingresó a la cancha, pero nunca salió del fuera
de juego.
Un cambio en el pequeño
del tiempo extra, Bruno Martins Indi por Klaas-Jan Huntelaar. El
ícono de las expresiones faciales en esta selección de los Países
Bajos brindaba su puesto en cancha al Cazador, quien había
sido el factor determinante para la remontada ante los aztecas. Poco
más de 15 minutos en el partido y casi nada pudo aportar, salvo
ganarse una tarjeta amarilla al chocar con el portero Navas en la
agonía del encuentro.
Dos cambios que
oxigenaron el movimiento ofensivo de Holanda que ya contaba con un
Robben en otro de esos días donde se mantuvo inspirado y con un
Sneijder que sobresalió por su convicción y movilidad en la
mediacancha. Todo esto y no fue suficiente, era imposible anotar el
gol.
No había manera ya de
evitar los penales y van Gaal toma una decisión impresionante: sacar
a Cillessen para darle ingreso a Tim Krul, jugador del Newcastle que
no había tenido acción en toda la Copa del Mundo. El espigado
portero terminó atajando dos penales, uno a Brian Ruiz, el otro a
Michael Umaña para meter a Holanda en semifinales, donde ya lo
esperaba Argentina.
Cuestionado pero atinado
cambio de Louis van Gaal, meter a un portero atajapenales como
Tim Krul para cerrar el partido es algo que jamás se había visto en
la Copa del Mundo… Pero, ¿qué tal si el cambio de van Gaal no fue
el ingreso de un atajapenales?
Un portero que hace menos
de ocho meses se perfilaba como reemplazo generacional de Maarten
Stekelenburg en Holanda, pero las lesiones en el fútbol inglés y la
decorosa temporada en el Ajax de Cillessen coartaron esa posibilidad.
Tuvo un récord de 14 atajadas en un partido de Premier League, pero
de los últimos 19 penales que le fueron lanzados sólo atajó dos.
Aquí, es donde parece
reflejarse el verdadero cambio: sacó a Cillessen para dar ingreso a
un miedo que Costa Rica no esperaba. Inculcó miedo en los de Pinto,
en ningún momento se esperaban ver entrar a un portero suplente a
menos de diez segundos para el inicio de un tiro de penales. La
inseguridad se vio en el equipo tico y dos de los penales
fueron atajados por Krul. Miedo, mucho miedo inculcó van Gaal en la
mente del rival.

No podría esperarse
menos de una mente tan maquiavélica y calculadora como la de Lucho,
vaya atinada osadía.

Leonardo Quinton

@FutbolMallorca / @leoquinton