Vicente
Guaita es uno de esos porteros a los cuáles se les achacan muchos de los
errores que tiene cualquier equipo de fútbol. En este caso hablamos
concretamente de los fallos de un Valencia que ha tenido una temporada bastante
irregular, tanto en el plano de lo deportivo, como en la gestión de un club que
busca un comprador urgentemente para liquidar sus deudas y poder reanudar a la
mayor brevedad posible las obras de su nueva casa, aún sin terminar.

Pero
el cancerbero natural de Torrent nunca se ha rendido y siempre ha luchado
contra viento y marea a pesar de las continuas tempestades de críticas que ha
tenido que padecer. Tener además a un rival en su puesto de la talla de Diego
Alves no ayuda precisamente a que el canterano haya tenido cierta estabilidad
en el conjunto ché a lo largo de su carrera deportiva.

A
pesar de ello, Guaita se erigió como el salvador de su equipo el pasado fin de
semana frente al Elche. Detuvo un penalti decisivo a Damián Suárez y sostuvo al
conjunto de Mestalla cuando las cosas se empezaban a torcer. El 2-1 final fue
un bálsamo para una afición y un equipo que están pensando en la semifinal de
la Europa League frente al Sevilla.

Pleno
de confianza, el guardameta del Valencia busca ahora retener la titularidad,
más aún cono lo que se avecina en las próximas semanas. Guaita quiere colaborar
en que la temporada valencianista finalice de la mejor manera posible, y para
ello habrá de emplearse a fondo  en los
próximos encuentros (sobre todo cuando la plantilla del Turia reciba a un
Atlético de Madrid jugándose el título de Liga y visite a un Real Madrid en
condición similar a la de los colchoneros).

Viniendo
de la cantera como otros héroes de esta temporada de la talla de Paco Alcácer o
Juan Bernat, el torrentí está colmado de ilusión. Seguramente aportará el
granito de arena que le falta al Valencia para lograr sus objetivos, que se
centran sobre todo en estar en la final del próximo 14 de mayo en el Juventus
Stadium.