El Hospital de Llevant Manacor FS afronta la recta final de la temporada con la intención de cambiar la dinámica negativa de los resultados en las últimas fechas en las ocho jornadas de liga que restan para cerrar la campaña. Este sábado juegan en la pista de Magna Navarra (18:30 horas), una pista en la que el conjunto balear ha realizado buenas actuaciones en las últimas temporadas. Urge conseguir una victoria que sirva para mantener la distancia con el puesto de descenso que ahora es de nueve puntos. Éste se ha convertido ahora en el objetivo más inmediato, confirmar la permanencia de forma matemática y mejorar las prestaciones ofrecidas hasta el momento.
Los de Tomás de Dios siguen sin conocer la victoria desde que comenzó este año y no ganan un partido desde el pasado 13 de diciembre ante Jaén en el Palma Arena. Desde entonces, han pasado dos meses y medio en los que ha jugado siete partidos en los que han conseguido únicamente dos empates por las cinco derrotas cosechadas. Además, los mallorquines deberán mejorar sus registros a domicilio dónde solo han ganado dos partidos en toda la temporada. Enfrente tendrán a Magna Navarra, un equipo consolidado en la zona alta de la tabla en las últimas temporadas y que apenas ha dejado escapar tres partidos en su feudo.
El Hospital de Llevant no estará solo en Navarra ya que viajará este sábado por la mañana con más de 100 aficionados que arroparán al equipo en el segundo desplazamiento masivo de la temporada. Tras la experiencia positiva de Santiago, el club ha organizado un nuevo viaje para los aficionados que han agotado el centenar de plazas existentes. De hecho, las plazas se agotaron hace más de un mes.
El jugador del Hospital de Llevant, Manu Orellana, afirma sobre el partido que “hay muchas ganas de sumar de tres en tres porque siempre ha sido el objetivo pero no lo estamos cumpliendo. Si el sábado conseguimos una victoria nos dará moral. Hay que darlo todo el fin de semana porque en los entrenamientos lo damos pero no se compite como toca”.
